En los cuatro telegramas, además del saludo cordial a los mandatarios de cada nación, Francisco aseguró su oración para que Dios les bendiga “con paz y bienestar”.
Al presidente de Grecia, Prokopis Pavlopoulos, el Papa le expresó en su telegrama que “envío saludos cordiales a su Excelencia y a sus conciudadanos mientras sobrevuelo el país en mi camino a Kenia para una visita pastoral. Invoco divinas bendiciones sobre Grecia, y rezo para que Dios Todopoderoso los bendiga a todos con paz y bienestar”.
El Santo Padre expresó al presidente de Egipto, Abdel Fattah Al Sisi, y al pueblo egipcio su “cordial saludo”, al tiempo que invocó “la bendición del Todopoderoso sobre la nación, rezo para que les pueda conceder bienestar y paz”.
Al presidente de Sudán, Omar Al-Bashir, Francisco escribió: “al entrar en el espacio aéreo de la nación mientras viajo a Kenia para una visita pastoral, le extiendo saludos cordiales a su excelencia y conciudadanos. Rezo para que el Todopoderoso pueda conceder a Sudán las bendiciones divinas de la paz y prosperidad”.
En su último telegrama, al presidente de Etiopía, Addis Ababa, el Santo Padre manifestó sus “cordiales saludos a su Excelencia y a sus conciudadanos. Asegurándole mis oraciones por la paz y bienestar de la nación, invoco bendiciones divinas sobre todos ustedes”.
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— ACI Prensa (@aciprensa) noviembre 25, 2015
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