La Misa por la fiesta del patrono de la ciudad, San Luis Rey de Francia, se celebró el martes 25 de agosto en la Catedral local y fue presidida por Mons. Gabriel Bernardo Barba, instalado como nuevo obispo de la diócesis en julio.
López fue inicialmente invitado por el municipio, que tradicionalmente comparte con las autoridades de la iglesia la preparación de la Misa. Según López, cuando el nuevo obispo supo la noche anterior que había sido invitado a la celebración de participación restringida por razones de la pandemia, decidió incluirlo activamente en la ceremonia, ofreciéndole leer la segunda petición de la oración de los fieles.
Tras la Misa, López dijo a un medio local que estaba “muy contenta por la invitación” al poder asistir a “la catedral de San Luis como una persona trans y como una referente social que tiene un comedor que le da la vianda (comida) a 400 personas”.
López dijo además que su participación en la Misa fue un hecho “muy simbólico y deja mensajes claros de que la Iglesia tiene el deseo de abrir sus puertas y congregar a los fieles que pertenecen a familias diversas y del colectivo (LGBT)”.
López, que trabaja como docente en una universidad local, consideró que su participación en la Misa “no es un logro personal” sino algo que le va permitir a los miembros del colectivo LGBT “asistir a toda las celebraciones tal cual son, sin estar mintiendo con una vida de la ‘heteronorma’ que no corresponde”.
Para el colectivo LGBT y la ideología de género, la “heteronormatividad” es la “imposición social” según la cual existen solo dos sexos, masculino y femenino, como sostienen las enseñanzas de la Iglesia.
La Diócesis de San Luis informó que en su homilía, Mons. Barba resaltó algunos aspectos de la vida del santo rey de Francia como la ayuda a los más necesitados y la escucha de la palabra de Dios.
“San Luis es un claro ejemplo de que el Evangelio puede ser vivido desde todo lugar, de poder y gobierno, como fue el estar a cargo justamente de un reino”, dijo el Prelado.
Mons. Barba encabezó durante siete años la Diócesis de Gregorio de Laferrere. Sucedió como Obispo de San Luis a Mons. Pedro Daniel Martínez Perea, cuya renuncia al cargo fue aceptada por el Papa Francisco el 9 de junio de este año, cuando el Prelado tenía 64 años, 11 años menos de la edad a la que los obispos se jubilan de acuerdo al derecho canónico.
Publicar un comentario