El joven, asesino de sí mismo

Necesario llenar su corazón de Dios

La Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de Guadalajara prepara su próxima Asamblea Diocesana y la visita
de los signos de la Jornada Mundial de la Juventud.

Monserrat Ayala Razo

¿Qué sucede con los jóvenes? Es una pregunta que cada día nos hacemos con mayor frecuencia, cuando se comienza a hacer costumbre verlos que exceden los límites, que en ocasiones, pueden tener consecuencias trágicas.
Ante esta situación, la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de Guadalajara  ha buscado diversas actividades  para fortalecer a este sector de la sociedad y formar a hombres y mujeres de bien,  en quienes está el futuro de nuestro país.

El Padre  Octavio Israel Ramírez Vázquez, Asesor Diocesano de Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de Guadalajara indicó, que además de realizar esta labor, se busca rescatar y fortalecer los valores importantísimos como el respeto por la vida desde su concepción hasta la muerte natural. 

“Que el joven entienda el valor de la existencia humana, que el joven tenga respeto por la vida no quiere decir que respete la vida del otro, ni la de sí mismo. Hoy el joven se ha convertido en el asesino de sí mismo, porque los hábitos que tiene lo han llevado a tener una vida sin sentido, están vacios del corazón, se sienten solos, se sienten desamparados, y cuando se presentan los retos de la vida, no tienen esta fuerza y estas posibilidades para salir adelante”

Destacó que también se quiere rescatar la solidaridad, para con ello, lograr una verdadera empatía por el prójimo “Cuando yo encuentro que tengo una solidaridad  me puede evocar  mis fuerzas  hacia  la otra persona,  y es cuando  aparece este signo de la solidaridad, cuando yo camino con el otro,  sufro con  el otro, comparto mi existencia  con el otro, motivado por la caridad”

Finalmente comentó que en la Pastoral Juvenil no se trata de llevar un mensaje distinto,  o decir cosas diferentes para convencer a los jóvenes, sino que se trata de llevar el anuncio de Jesucristo Salvador, pero de formas diferentes.

“Creo que más allá de proponer nuevas cosas es recuperar lo que ya tenemos, que el joven recupere el valor de su propia existencia desde el respeto de su propia persona y a su prójimo”.

Por su parte, en rueda de prensa para abordar temas sobre la Asamblea Diocesana de Pastoral Juvenil y la visita de los Signos de la Jornada Mundial de la Juventud a nuestra ciudad,  el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, recordó que los adultos tienen la gran responsabilidad de transmitir a las futuras generaciones lo que significa seguir a Jesucristo como modelo de vida.  Por ello, dijo, “no podemos esperar que ellos, así por mera espontaneidad, se entusiasmen por la fe, tienen que entusiasmarse  por el conocimiento que nosotros les transmitamos, pero sobre todo, por el testimonio que nosotros les demos a las nuevas generaciones”.