En un comunicado, el Administrador Apostólico de Cúcuta, Mons. José Libardo Garcés Monsalve, señaló este 18 de mayo que el P. Bravo, luego de “permanecer durante 16 días en la UCI y 12 días en habitación del Hospital Erasmo Meoz” ha logrado superar la enfermedad “para incorporarse de nuevo a las actividades cotidianas de su vida ministerial”.
El Prelado agradeció las oraciones y súplicas del “pueblo creyente que se acogió a la protección de Dios, de la Santísima Virgen María bajo la advocación de la Casika de Cúcuta y del Glorioso Patriarca San José”, que junto al trabajo del equipo médico han logrado salvar la vida del sacerdote.
“Han permitido que todos experimentemos cómo el Señor responde con misericordia a quienes acuden a Él con Fe y Esperanza”, agregó.
Mons. Garcés reconoció la labor de la directiva del “Hospital Erasmo Meoz, al Equipo de especialistas, personal de enfermería, al Equipo de rehabilitación y al personal de servicios generales que brindaron la mejor atención y cuidado para la recuperación” del P. Bravo.
Además, indicó que continuará elevando sus plegarias a Dios para que derrame bendiciones abundantes sobre el personal de salud que “en este tiempo de pandemia, no escatima esfuerzos para servir con amor y generosa entrega a los más débiles y necesitados”.
“San José Patrono de la Diócesis de Cúcuta, ruega por nosotros y provéenos. Reciban mi bendición”, concluyó.
Según las últimas cifras oficiales, Colombia tiene un total de más de 107 mil casos de COVID-19 positivos activos y registra más de 81 mil muertes a causa del virus.
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