El Santo Padre mostró, en el telegrama dirigido al actual Arzobispo, su tristeza por “la muerte de Su Eminencia el Cardenal Keith Patrick O’Brien”, y ofreció “de corazón mis condolencias a usted, a la familia y a todos los que lloran su muerte”.
“Encomiendo su alma al amor misericordioso de Dios, nuestro Padre, y garantizo mis oraciones a la Archidiócesis de Saint Andrews y Edimburgo, y, cordialmente, imparto mi bendición apostólica como prenda de paz y consuelo en nuestro Señor Jesucristo”.
El Cardenal O'Brien falleció el pasado lunes 19 de marzo a la edad de 80 años, en compañía de su familia y amigos.
El actual Arzobispo de Edimburgo, Mons. Leo William Cushley, también ofreció sus oraciones por el fallecido Cardenal, su familia y todos aquellos afectados por el escándalo.
“En vida, el Cardenal O’Brien puede haber dividido la opinión. Pero en la muerte creo que podemos unirnos para rezar por su alma y por el consuelo de sus familiares; así como por el apoyo a los que se sintieron ofendidos o decepcionados por él. Que descanse en paz”, afirma el Arzobispo.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 11 de marzo de 2018
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