REDACCIÓN CENTRAL, 10 Mar. 19 (ACI Prensa).- Este 10 de marzo la Iglesia celebra el primer domingo de Cuaresma. El Evangelio del día corresponde a la lectura de Lucas 4: 1-13, pasaje que narra el momento en que Jesús es tentado en el desierto.
A continuación puede leer el Evangelio y la Homilía del Obispo de Santa María de los Ángeles (Chile), Felipe Bacarreza Rodríguez:
Evangelio del día (Lucas 4:1-13)
1 Jesús, lleno de Espíritu Santo, se volvió del Jordán, y era conducido por el Espíritu en el desierto,
2 durante cuarenta días, tentado por el diablo. No comió nada en aquellos días y, al cabo de ellos, sintió hambre.
3 Entonces el diablo le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan.»
4 Jesús le respondió: «Esta escrito: No sólo de pan vive el hombre.»
5 Llevándole a una altura le mostró en un instante todos los reinos de la tierra;
6 y le dijo el diablo: «Te daré todo el poder y la gloria de estos reinos, porque a mí me ha sido entregada, y se la doy a quien quiero.
7 Si, pues, me adoras, toda será tuya.»
8 Jesús le respondió: «Esta escrito: Adorarás al Señor tu Dios y sólo a él darás culto.»
9 Le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el alero del Templo, y le dijo: «Si eres Hijo de Dios, tírate de aquí abajo;
10 porque está escrito: A sus ángeles te encomendará para que te guarden.
11 Y: En sus manos te llevarán para que no tropiece tu pie en piedra alguna.»
12 Jesús le respondió: «Está dicho: No tentarás al Señor tu Dios.»
13 Acabada toda tentación, el diablo se alejó de él hasta un tiempo oportuno.
Puede revisar las otras lecturas litúrgicas del día en el siguiente enlace: https://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=10&mes=3&ano=2019#4
Homilía de Mons. Bacarreza:
Todos experimentamos que el paso del tiempo ha dejado en nosotros su huella. Pero lo va haciendo de manera imperceptible. De esta misma manera, el secularismo que nos rodea, que es la prescindencia total de Dios, termina por afectarnos y debilitar nuestras convicciones más arraigadas. Cada uno puede tomar como dirigido a sí mismo el reproche que el Señor hace a la Iglesia de Éfeso: "Tengo contra ti que has perdido el amor de antes. Date cuenta, pues, de dónde has caído, conviértete y vuelve a tu conducta primera" (Apoc 2,4-5). También cada uno de nosotros tiene que convertirse para volver al fervor inicial. Este es el sentido de la Cuaresma, que hemos empezado el miércoles de ceniza pasado. La Cuaresma es un tiempo de conversión.
Para leer la homilía completa puede dar click en el siguiente enlace: https://www.aciprensa.com/homilias/homilia.php?id=533
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