Los peregrinos salieron a las 14.30 de la intersección de las calles Arijón y Ayacucho, en Rosario, tras la bendición del arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín.
"Venimos a recordarles a los peregrinos que no somos vagabundos sino peregrinos, que es alguien que sabe dónde va y tiene una meta y una misión que cumplir", manifestó el prelado rosarino y agregó: “La meta es el Cielo y la misión es en la Tierra trabajando para el bien del prójimo en el camino del amor que es el que nos va a llevar al Cielo".
Los peregrinos hicieron paradas en Pueblo Esther, Arroyo Seco, Pavón y Villa Constitución.
La columna principal, precedida por la imagen de la Virgen del Rosario, llegó a las 7.13 al “campito” del santuario de San Nicolás.
La imagen mariana fue transportaba en una camioneta y escoltada por motociclistas y personal de la Guardia Urbana Municipal (GUM) de Rosario.
La misa fue presidida por el obispo de San Nicolás de los Arroyos, monseñor Héctor Cardelli.
Durante la manifestación de fe, los jóvenes pidieron a la Virgen por “la dignificación, unión y fortaleza de las familias", el respeto a la vida en todas sus concepciones, los derechos del niño por nacer, la recuperación de los adictos y la “conversión” de los narcotraficantes, entre otras intenciones.+
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