Además, informó que en ocho iglesias ya se reanudó el culto público, así como la adoración al Santísimo Sacramento.
La oficina de prensa de la Diócesis de Tacna y Moquegua indicó a ACI Prensa que el Comité de Bioseguridad diocesano terminó de supervisar “la implementación y el cumplimiento de las medidas de seguridad” establecidas en su protocolo diocesano en 19 de las 20 parroquias que hay en Tacna, y en las 12 parroquias de Ilo y Moquegua.
Además, señaló que el Obispo de Tacna y Moquegua, Mons. Marco Antonio Cortez, puso a evaluación y criterio de cada párroco la reapertura gradual de sus parroquias en Tacna para Misas diarias desde el lunes 3 de agosto. En el caso de Moquegua e Ilo, bajo previo acuerdo con los párrocos, se decidió que se mantengan cerrados los templos, pues la situación de la pandemia aún es crítica de coronavirus COVID-19.
La oficina de prensa también indicó que el 16 de julio, en la festividad de la Virgen del Carmen, la Catedral de Tacna abrió sus puertas después de cuatro meses para la celebración de la Santa Misa con fieles, que fue presidida por Mons. Cortez. Luego, el 19 de julio, además de la Catedral, otras parroquias que cumplen con el protocolo de bioseguridad reiniciaron oficialmente misas públicas dominicales.
Algunas de las parroquias que ya están celebrando Misas con presencia de fieles cada domingo en Tacna, además de la Catedral, son: la Parroquia San Pedro Apóstol Vicaría, la Parroquia San Martín de Porres, la Parroquia Nuestra Señora de la Paz, la Parroquia San José Misericordioso, la Parroquia Sagrada Familia, la Parroquia San Juan XXIII y la Parroquia Espíritu Santo.
Además de las Misas, el jueves 23 de julio los fieles asistieron a la primera adoración pública del Santísimo Sacramento en algunas parroquias locales. Sin embargo, la oficina de prensa aclaró que desde hace un mes las parroquias en Tacna mantuvieron abiertas sus puertas durante las adoraciones al Santísimo, pero sin permitir el ingreso a los fieles.
El Obispo decidió mantener abiertas las puertas de las iglesias para adoración a la Eucaristía, pero sin ingreso de fieles, con la especial misión de rezar por los enfermos y personas afectadas por la crisis del coronavirus, y también, por el fin de la pandemia.
En relación a la prohibición del Estado de celebraciones religiosas que impliquen aglomeración de personas, la oficina de prensa precisó que Mons. Cortez anunció en la Misa del 19 de julio que si bien se reanudarán las Misas dominicales con la presencia de los fieles, quedan suspendidas todas las celebraciones y fiestas grandes como la de Nuestro Señor de Locumba, la Virgen de Copacabana, el Señor de los Milagros, entre otras posiblemente hasta finales de 2020.
No obstante, subrayó, tal y como los centros comerciales y restaurantes han reabierto sus instalaciones en el territorio nacional de acuerdo a sus protocolos, la Diócesis decidió que ya era momento de reabrir las iglesias bajo las mismas medidas y protocolos de bioseguridad indicados y aprobados por el Ministerio de Salud y las autoridades nacionales.
El “Protocolo Diocesano para las Actividades Religiosas de la Iglesia Católica en tiempos de Pandemia” fue elaborado a partir del protocolo emitido por la Conferencia Episcopal del Perú, y actualmente sitúa a la ciudad de Tacna en la cuarta fase de apertura de los templos que permite el ingreso de fieles a un tercio de su capacidad de aforo.
Para evitar aglomeraciones, la oficina de prensa explicó que en la Catedral de Tacna, donde hay más horarios de Misa dominical y mayor asistencia de personas, se sugiere el ingreso de fieles bajo previa inscripción con uno o dos días de anticipación. Además, dijo que en caso no se alcancen cupos, los fieles pueden ser programados para asistir a las Misas diarias.
También “con la finalidad de cuidar la vida y salud de los fieles”, la Diócesis dispuso que los menores de 14 años y adultos mayores de 65 años no asistan a Misa dominical, pues en este día de la semana hay una mayor aglomeración de personas. Sin embargo, sí se les permite asistir a Misa los días de semana y también, se seguirán transmitiendo las celebraciones eucarísticas por medios virtuales.
El Comité de Bioseguridad diocesano es liderado por el P. Guillermo Purizaca, vicario general, y está integrado por una enfermera, un abogado, un ingeniero y parte del personal administrativo de Cáritas Tacna y Moquegua, encargados de inspeccionar el cumplimiento del protocolo en las parroquias, que incluye la señalización e instalación de separadores, pediluvios, entre otros.
El Comité Diocesano, en coordinación con los comités de bioseguridad parroquiales, capacita a los responsables de las iglesias una vez por semana de forma virtual para garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias.
Según reportes del Ministerio de Salud del Perú, en Tacna se registraron 2.250 personas infectadas con COVID-19, en Moquegua sumaron 2.287, y en todo el país se han confirmado 375.961 casos.
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