Texto y foto:
Jorge Hernández Aguirre
Como parte de su visita pastoral a la Comunidad de Hostotipaquillo, Jalisco, el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, administró el Sacramento de la Confirmación a 139 jóvenes el sábado 11 de febrero.
Acompañados de papás, padrinos, y los fieles que se congregaron en la Parroquia de Nuestra Señora del Favor, los confirmados escucharon las palabras del Arzobispo Metropolitano, quien en su Homilía les recordó la importancia de seguir el ejemplo de Jesús, y de continuar con la obra que hizo cuando estuvo entre nosotros.
“Cristo Nuestro Señor perdonaba los pecados de todos los pecadores; no los acusaba, no los condenaba, sino que los acogía y los perdonaba. El que se confirma recibe una presencia especialísima del Espíritu Santo para escuchar más a Jesús, para seguir más de cerca a Jesús y para hacer las obras de Jesús”.
Además, destacó como un grave error, que a menudo cometen los padres, al pensar que con este Sacramento ya terminaron con el compromiso de guiar a sus hijos, por lo que recalcó que con esta mentalidad sólo se acaba con la fe, que es el tesoro más preciado que tenemos como humanos y cristianos, y que debe alimentarse con tres cosas: la Palabra de Dios, la oración y el amor.
“¿Saben cómo acaban los jóvenes y los papás que piensan así? Acaban con la fe, que es el tesoro más preciado que podemos tener en esta vida. Por eso la vida cristiana, en tantas personas, es tan mediocre, es tan pobre, no existe la vida de fe; viven como si Dios no existiera, como si ellos nunca hubieran sido bautizados, confirmados; viven indiferentes, hasta burlándose, y a veces, hasta contrarios a la fe porque se apartan”.

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