En nuestras manos está elegir la salvación

Texto y foto:
Yara Martínez González
 
Dios nos da entera libertad de elegir entre el Bien y el Mal, y de eso depende nuestra salvación, aseguró el Arzobispo de Guadalajara, Cardenal José Francisco Robles Ortega, quien presidió la Santa Misa en la Parroquia de La Madre de Dios, en la Colonia Providencia, con motivo de las Fiestas Patronales.
El domingo 12 de febrero, el purpurado se reunió con los fieles de esta Comunidad, a quienes en su Homilía dijo que los seres humanos no podemos responsabilizar a Dios de lo que nos sucede por causa de nuestras decisiones, porque “a veces el mal que padecemos y que sentimos es fruto de nuestras malas elecciones, de haber elegido un camino equivocado.
“Dios nos invita a que nos pongamos ante el Bien y ante el Mal, y nos reta a elegir, pero de lo que elijamos respecto del Bien o respecto del Mal, está en juego toda nuestra vida, toda nuestra felicidad en esta tierra, y en último término, nuestra salvación. Si elegimos el Bien, elegimos la vida aquí y ahora, y la plenitud de la vida después de nuestra muerte”.
Asimismo, señaló que en los Mandamientos de la Ley de Dios se nos traza el camino del Bien; sin embargo, Jesucristo Nuestro Señor toma de ellos tres aspectos importantes para nuestra vida: no matarás, no desearás la mujer de tu prójimo, y no jurarás el nombre de Dios en vano.
“Le hacemos mal al prójimo no sólo quitándole la vida, lo cual es gravísimo; también, ofendiéndolo, manifestándole desamor, desprecio; de cierta manera, así también matamos al prójimo” (…) 
Finalmente, sobre el adulterio, el Arzobispo Metropolitano mencionó que el que mira una mujer que no es la propia con intenciones malas, ya adulteró en su corazón. Asimismo, de jurar el nombre de Dios en vano, dijo que no es válido poner a Dios como testigo ni pretexto para justificar nuestras acciones equivocadas.