La eugenesia no era sólo cosa de nazis: Nixon destinó fondos federales para esterilizar

La eugenesia no es cosa de nazis, como el tópico nos quiere hacer creer. En realidad, la búsqueda de una raza superior y la limpieza étnica es un invento anglosajón. El británico Francis Galton -y otros intelectuales anglosajones de finales del siglo XIX y comienzos de siglo XX- expusieron esos planteamientos, ya que pretendía librar a la humanidad de degenerados y criminales, a golpe de laboratorio o de esterilizaciones. La que llevó esa  corriente eugenésica al extremo fue la norteamericana Margaret Sanger a través de la multinacional que fundó, Planned Parenthood. La idea era  acabar con el débil y fomentar una raza de purasangres. Mucho más cerca en el tiempo, en los años 60 del siglo XX y bajo la administración de Richard Nixon (1969-1974) fueron esterilizadas casi 400.000 personas pobres sin haber sido informadas plenamente. El Gobierno norteamericano ponía en marcha un programa eugenésico en toda regla con fondos públicos. Así lo indica el documental "Cuestión de genes" , producido por Paragon Media y emitido recientemente por Televisión Española. Esta práctica siempre ha sido utilizada como justificativo para practicar la discriminación, obligar a la esterilización de grupos sociales y hasta exterminar a las razas o etnias consideradas como inferiores. Durante la época del presidente Nixon las enfermeras y los médicos decidían quiénes podían tener hijos y quiénes no. Se consideraba una solución para la pobreza y era legal a nivel estatal.  Puede parecernos sorprendente en una democracia avanzada como la norteamericana, pero era así. Y los detalles de quienes fueron víctimas de las esterilizaciones resultan elocuentes. La Junta de Eugenesia, relata una víctima, estaba formada por 5 hombres blancos que ponían una señal en el documento de cada persona que pasaba por la mesa. Posteriormente, un trabajador social tenía que considerar torpe, retrasado o con algún problema al paciente y decir "quiero que se esterilice a esta persona". Víctimas estadounidenses que ha sufrido esta atrocidad, como Willis Lynch o la mujer de color Elaine Ridick, que fueron operados cuando apenas tenían 14 años, han dado un paso al frente  para compartir su historia de esterilización forzosa y denunciar esta práctica.

Existían fondos federales disponibles para cubrir los costes de la esterilización de aquellas personas que no pudieran permitírselo

A principios de los años 70, la administración Nixon envió una circular a cientos de clínicas de Planificación Familiar de todo el país informando de que existían fondos federales disponibles para cubrir los costes de la esterilización de aquellas personas que no pudieran permitírselo. Fue una práctica eugénesica porque aquellas clínicas no vieron nada malo en controlar la tasa de natalidad de las personas que consideraban una carga para la sociedad.

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