Crédito: Pintura original del Señor de la Misericordia de Ocotlán (1848) / Sistema Informativo del Prodigio de Ocotlán
El 3 de octubre de 1847 unas 2.000 personas que estaban en el camposanto de la capilla de La Purísima Concepción en la localidad mexicana de Ocotlán, fueron testigos de la aparición en el cielo de una imagen perfecta de Jesucristo Crucificado, la cual permaneció por más de 30 minutos.
A este hecho –aprobado por la Arquidiócesis de Guadalajara en 1911– se le conoce como “El Prodigio de Ocotlán” y ocurrió un día después de que un temblor dejara en ruinas a esta localidad del estado de Jalisco, con un saldo de 40 muertos.
El Sistema Informativo del Prodigio de Ocotlán indicó en un comunicado que la peregrinación por Europa comenzará con una Misa Solemne en el altar mayor de la Basílica de Guadalupe en el Tepeyac (México), y luego viajará a España, Portugal, Francia, Bosnia, Croacia, Italia y el Vaticano.
En el Vaticano, los peregrinos participarán en una audiencia con el Papa Francisco y luego la pintura regresará al Santuario del Señor de la Misericordia de Ocotlán, en México.
También se dio a conocer que en algunos lugares de culto de los países donde peregrinará, se dejará una réplica de la pintura elaborada por J. Miguel Castañeda en 1848.
En la peregrinación participarán más de 30 personas provenientes de la ciudad donde ocurrió el Prodigio, y estará dirigida por la agencia Peregrinaciones.mx y la parroquia del Señor de la Misericordia de la localidad.
Además, se indicó que otro objetivo de la peregrinación de la imagen es “conocer y confirmar” en la fe otros hechos prodigiosos ocurridos en la historia de la Iglesia, como las apariciones de la Virgen María en Fátima (Portugal); el milagro eucarístico en Lanciano (Italia); en Paray Le Monial (Francia), donde Santa Margarita María Alacoque recibió las visiones del Sagrado Corazón de Jesús; entre otras.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 18 de mayo de 2016
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