Religiosas Franciscanas: 120 años de optar por los pobres

Religiosas Franciscanas de Nuestra Señora del Refugio

120 años de compartir el amor y la misericordia

Mtro. Román Ramírez Carrillo

Las Religiosas Franciscanas viven el carisma de la Compasión y Misericordia en bien de los necesitados, según el ejemplo de San Francisco de Asís, para vivir el evangelio mediante la observancia de la pobreza, la castidad y la obediencia. Su espiritualidad es Evangélica, Mariana, Franciscana y Eclesial.

Historia de su fundación en Guadalajara
Dios dio su gracia con la fundación de la Congregación el día 7 de mayo de 1897, por la Venerable Sierva de Dios, María Librada Orozco Santacruz, asesorada y guiada espiritualmente por Fray Pascual Antonio Avelar López de la Orden de Frailes Menores, siendo Obispo de Guadalajara el Excmo. Sr. D. Pedro Loza y Pardavé.
María Librada nació en los inicios de la consolidación de una nueva nación, en la Hacienda de Guadalupe, en Arandas, Jalisco, el 20 de julio de 1834, una época de turbulencia social, de sacrificios y de grandes esperanzas, a escasos años de la promulgación de la Independencia de México.
Fue la más pequeña de la familia formada por Don Juan Orozco y Doña Teresa Santa Cruz, de armoniosas facciones, gozó de una esmerada educación recibida de sus padres. En Arandas pasó parte de su infancia y, como todas las niñas de las familias cristianas del lugar, adquirió los grandes valores de respeto a sus padres, a sus mayores, crecimiento espiritual, laboriosidad y caridad hacia los más necesitados.
Queriendo sus padres dar una educación más completa a sus hijos, se trasladaron a Guadalajara y se establecieron en la Villa de Zapopan. La familia creció bajo la protección de la Santísima Virgen de Zapopan y la dirección de los padres franciscanos.
La cronista de la Congregación, la Hna. Guadalupe León nos narra: “a los diecisiete años siente el llamado a la vida consagrada e ingresa con las dominicas de Jesús María en Guadalajara, sin embargo, por la persecución religiosa de la época, las religiosas se dispersan y ella regresa con su familia, pero no por eso ella deja de estar con una vida de recogimiento de oración de penitencia, su vida espiritual siempre estuvo dirigida por los padres franciscanos”.

Se fragua una vocación
El momento decisivo que la ayudó a descubrir lo que Dios quería de ella, fue el encuentro con una joven embarazada que acudió a ella pidiendo ayuda en su problema moral ya que pesaba sobre ella el rechazo de su familia y sociedad.
Y refiere la Hna. Ma. Gpe. León: “Esto movió hondamente las fibras del corazón sensible de Libradita. No teniendo por el momento donde tenerla, alquiló una casita y ahí cuidó de ella.” Buscó entonces un sitio donde proteger y formar a jóvenes como ésta y se acordó que existía un lugar dedicado a este fin. Lo buscó y lo encontró en ruinas, anexo a un templo que se abandonó cuando apenas comenzaba a construirse, ubicado entonces en Ángulo y Mezquitán, Garibaldi y Moro, hoy Federalismo.
La visión de la compasión
y misericordia
La Hna. Belén García Yáñez, Superiora General, nos relata que antes de ir a conocer esa casa por la noche, “nuestra madre Libradita sueña que va a visitar aquella casona destruida, y, al entrar, ve un Niño Dios encadenado, que quitándose las cadenas se las pone a ella; ve también un Divino Preso y una Dolorosa.
Y a la mañana siguiente cuando entra a conocerla, ve lo que en su sueño había contemplado”. Para la Hermana Belén, esos fueron los signos de que su alma compasiva estaría en el futuro encadenada al dolor de los demás y cercana al sufrimiento, buscando la esperanza. “significados que poco a poco irá develando”, nos señala.
Libradita comunica su proyecto y su sueño, a sus amigas y a su director espiritual, Fray Teófilo García Sancho, que muy pronto vibran y se unen a ella.
Fray Teófilo le concede como asesor y guía al padre Fray Pascual Antonio del Niño Jesús Avelar López; un joven y ejemplar religioso que les ayuda a presentar al Excmo. Sr. Arzobispo Pedro Loza y Pardavé el proyecto, y Libradita recibe la casona en ruinas para hacer realidad su proyecto.

La Espiritualidad
de las Hnas. Franciscanas
La Congregación vive la Regla y vida de los Hermanos y Hermanas de la Tercera Orden Regular de San Francisco de Asís, netamente Evangélica, confirmada por el Santo Padre San Juan Pablo II y las Constituciones actualizadas según las normas de la Iglesia y aprobadas por la Santa Sede el 15 de noviembre de 1993.
La Hermana Martha García Gómez, Superiora Provincial, nos comparte que el Documento de las Constituciones “nos marca el camino, ya que su centro es Cristo, y nos ayuda a vivir el Evangelio según el ejemplo de Nuestro Padre San Francisco de Asís, bajo una espiritualidad Evangélica-Mariana-Franciscana-Eclesial y teniendo como único fin La Gloria de Dios, contribuyendo a la salvación del mundo y procurando la santificación de las hermanas mediante la fiel observancia de los consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia, vividos a través del CARISMA Compasión y Misericordia en bien de los necesitados, especialmente con los más próximos”.

 

Los Apostolados

Los apostolados donde la Congregación pone en práctica el carisma son:

1. Promoción integral de la Mujer en Casas Hogar para mamás solteras
2. Educación en colegios
3. Casas hogar para niños desamparados
4. Casas Hogar para niñas y niños internos
5. Pastoral en misiones y parroquias
6. Pastoral de la salud en hospitales, y dispensarios médicos
7. Casa hogar para personas de la tercera edad.

Testimonio del Arzobispo Emérito Sr. Felipe Aguirre Franco

Al estar cumpliendo 120 años de su fundación por la Sierva de Dios la madre Libradita, quiero enviar una felicitación muy cálida, muy sincera, con gratitud y reconocimiento a toda la labor que están realizando, sobre todo aquí en nuestra Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez. Ustedes fueron precursoras de esta Diócesis, cuando se fundó en 1965, puesto que ya existían aquí, dando su trabajo, dando su labor.
Históricamente han acompañado el nacimiento, el crecimiento, el fortalecimiento, y el desarrollo de esta Diócesis que ya ha cumplido 50 años de existencia juntamente con su seminario, y muchas otras obras, quiero felicitarlas porque aquí ellas también han acrecentado su servicio, puedo decir que es una de las congregaciones que más han guiado en medio de nosotros.
Al cumplir 120 años de su fundación quiero desearles que sigan conservando este carisma del Espíritu Santo, iluminadas con San Francisco y su fundadora la madre libradita, puedan llegar a hacer aún todavía más, que sigan sirviendo a la iglesia.
Dios les pague porque en los 28 años que fui Obispo aquí en Tuxtla, fueron como dice San Pablo compañeras cercanas, colaboradoras indispensables para el Evangelio de Cristo. Sigan a cristo vayan en su seguimiento con la radicalidad que entonces prometieron en su fundación, no cabe duda que la conservación de esos espíritus de pobreza con que ustedes han vivido, la autenticidad y el carisma es lo que les ha dado perseverancia, fortaleza y crecimiento.

Frutos de la Congregación

Las instituciones que han fundado con el carisma de Compasión y Misericordia en bien de los necesitados:

l Casa Hogar del Señor Grande de Ameca
l Colegio en Arequipa Perú
l Casa Pastoral en Atlanta
l Instituto Médico Social El Refugio
l Colegio El Refugio
l Casa de Retiro y Formación en Indianápolis
l Casa Hogar de Ancianitas en Jocotepec
l Colegio Asís en Puebla
l Casa de Estudiantes y Casa Procura en Roma
l Internado Francisco Javier Clavijero
l Colegio Sierra de Tapalpa
l Sanatorio San Francisco de Asís en Guadalajara
l Sanatorio de Señora de Lourdes en Degollado
l Centro de Espiritualidad Villa Porciúncula
l Instituto Tlaquepaque
l Colegio Magallanes en Totatiche
l Casa de Formación en Copoya, Chiapas
l La Misión de Chapultenbango Chiapas
l Casa pastoral El Jobo
l Internado y Misión de Jitotol
l Misión de Ostuacán Chiapas
l Casa Pastoral en Raudales de Malpaso
l Albergue Esperanza en Tapachula Chiapas
l Casa Provincial Tuxtla Gutiérrez Chiapas