El dron está adornado con los colores de la bandera vaticana, blanco y amarillo, y lleva el lema del escudo papal: “Miserando atque eligendo”.
El Pontífice se mostró sorprendido por el regalo y sintió curiosidad por el moderno aparato. Según un comunicado de la escuela, el vehículo representa “los valores de la tecnología al servicio del hombre”.
Estos aparatos son usados por diversos gobiernos y por empresas audiovisuales, aunque su uso está regulado. Los jóvenes quisieron mostrar cómo pueden ser útiles también para ayudar a las personas, en concreto estos días se están utilizando en la tragedia del terrible sismo en Nepal que ha dejado miles de muertos y destrozado el país.
No es la primera vez que el Papa Francisco recibe un regalo extraño o cuanto menos curioso. Es habitual que en las audiencias y encuentros reciba todo tipo de objetos y gestos, desde que se toque un tango por su cumpleaños, hasta yerba mate o un espectáculo circense.
El Santo Padre utiliza estos regalos para ayudar a los más necesitados. Su destino no son las estancias vaticanas, sino las asociaciones de beneficencia. Por ejemplo, el pasado mes de diciembre anunció una subasta de regalos en la que todo el mundo pudo participar comprando boletos en diferentes lugares de Roma y del Vaticano.
Los premios más importantes fueron un Fiat, una máquina de café y una bicicleta. Los resultados se conocieron en enero.
Publicar un comentario