Al quemar o deforestar los bosques se deterioran o eliminan estos “sumideros” naturales que absorben los gases de efecto invernadero causantes del cambio climático, advirtió la investigadora del departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Valentina Davydova Belitskaya.
El último incendio en La Primavera, afectó 800 hectáreas del Área Natural Protegida y causó una emergencia atmosférica en la zona metropolitana de Guadalajara, por lo que la académica solicitó que se investigue y castigue a los culpables y que se reforeste el bosque antes de la temporada de lluvias.
A su vez, el meteorólogo Gustavo Salgado Rodríguez, investigador del Instituto de Astronomía y Meteorología de la UdeG, añadió que el bosque, como la Barranca de Oblatos, contribuye a la formación de nubes, debido a la evapotranspiración de las plantas que inciden en que “se laven todos los contaminantes en la atmósfera”.
El reciente incendio del bosque La Primavera, provocó que la temperatura de la ZMG aumentara 1.5 grados Celsius con respecto a lo normal. La capital de Jalisco ha registrado temperaturas de 34 grados Celsius, y en los próximos días podría ascender a los 36 grados.
Los incendios forestales producen una gran cantidad de partículas suspendidas totales y menores de 10 micras, causantes de diversas enfermedades respiratorias. Los académicos recomendaron la instalación de estaciones de monitoreo en las inmediaciones de La Primavera para, en casos como el reciente, cuantificar con exactitud el impacto del daño ambiental.
En la actualidad existen diversos usos de las aeronaves controladas de forma remota, que pueden resolver problemas cotidianos como los incendios forestales, aseguró el maestro en Ciencias por la UdeG, Roberto Carlos Barragán Campos.
Durante su conferencia “Uso y aprovechamiento de las aeronaves controladas de forma remota: la realidad en México”, en el Foro de Educación Aeroespacial en la Feria Aeroespacial México 2017, en la Base Aérea Militar No. 1 Santa Lucía, en el Estado de México, difundió el proyecto de estudio en el que trabaja junto con investigadores y estudiantes del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI), para el desarrollo de un sistema de prevención de incendios forestales con el uso de drones como herramienta para la obtención de datos cuantitativos.
“Lo más importante es no ver el dron como un juguete, sino cómo se puede usar y cómo puede servir para mejorar algo de la vida (…) El tema tiene que ver con las aplicaciones de los drones. En general, en México se utiliza en el campo de la agricultura, en la parte militar, en inspección de océanos, en los comportamientos volcánicos, filmación, cartografía, que son las más comunes en nuestro país”.
Explicó que el proyecto aún está en desarrollo pero ya hay una prueba de mapa del territorio que comprende el Bosque La Primavera, donde, a través de colores, se pueden detectar cuáles zonas son más propensas a un incendio.
“Todo ello debido a la recopilación de datos a través de sensores instalados en drones que han hecho recorridos por las zonas, así como análisis de hojas de encino y de pino, así como de maderas y suelos”.
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