
TU DÍA ACTUALL El acuerdo Estado-Iglesia en China. ¿Qué implicaciones tendrá para los católicos chinos el nuevo deshielo entre el Vaticano y el Gobierno chino? Un análisis oportuno y lúcido de María Isabel Moreno para Actuall. Cartas-bomba en los Estados Unidos. En una nación polarizada y metida en luchas partisanas, una ola de cartas-bomba está llegando a buzones de medios de comunicación, activistas y líderes políticos críticos con Donald Trump. Primero fue George Soros, luego las han estado recibiendo Hillary Clinton, Barack Obama o la Redacción de CNN, entre otros. Ninguna ha llegado a explotar, pero el clima político se ha enrarecido aún más. Donald Trump condenó estos ataques, aunque después pidió a los medios de comunicación –su bestia negra– un “tono más cívico”, como si fueran los medios los que provocan estos destructivos envíos. El FBI aún investiga quién está detrás. Situación de la caravana migrante. Miles de personas siguen avanzando a pie a través de México, intentando llegar a los Estados Unidos y entrar en el país. La multitud está ahora en Chiapas, al sur de México. El Gobierno de López Obrador ha recibido 2.727 solicitudes de asilo, pero ha advertido a los migrantes que no podrán quedarse ilegalmente en territorio mexicano. Protestas en Argentina. Sindicatos y organizaciones de izquierdas movilizaron a miles de personas el miércoles, en protesta contra el recorte del gasto social exigido por el Fondo Monetario Internacional en las condiciones del préstamo al país. Las protestas van a más, alegando sus organizadores causas como el aumento de las tarifas de la luz, el agua, el gas y el transporte público, en un contexto de inflación que los observadores internacionales prevén que alcanzará el 44% este año. La película que no ‘mola’ ver. Han retirado de muchas salas de cine Gosnell, la película sobre un médico abortista detenido por la muerte de una paciente. La película estaba entre las diez más vistas en su segunda semana de exhibición, pero su mensaje es demasiado incómodo para el consenso sobre el aborto. Candela Sande comenta esta noticia que no leerás en (casi) ningún otro medio. Chesterton, un regalo que no pasa de moda. Pablo Gutiérrez explica en este artículo para Actuall por qué sigue regalando libros del escritor y periodista inglés.
CARTA DEL DÍA Eludiendo el matrimonio... Qué bonito es el amor, mientras es bonito. Sobran firmas,
¡Hola!
Muchos lectores ya me conocen y, aunque no pretendo ser simpática a todos, deseo expresar algunos comentarios acerca del problema migratorio.
Todo lo que debía decirse ya se ha dicho. Solo quiero hacer hincapié en que, hoy, en este 2018 que finaliza, el problema migratorio es un problema de todos.
No sé si, allá en al Paleolítico o un poco más cerca, existía este problema porque no habían fronteras, aunque sí nomadismo. Pero, al menos desde Roma, comenzaron a haber diferencias entre "Ciudadanos" y aquellos de las colonias. ¿Por qué tuvo Jesús muerte de cruz, la cual no podía aplicarse a un ciudadano romano? ¿Por qué, en Francia, hay tal estricto concepto de nacionalidad y, sin embargo, hoy se reconoce a los Islámicos como "nacionales"? El rechazo sistemático a los migrantes había sido, hasta ahora, general y por costumbre. Pero hoy, o nos damos la mano todos, o nos hundimos todos.
Espero que [Donald] Trump y [Jair] Bolsonaro tengan la misma humanidad que el pueblo colombiano, que ha recibido a los venezolanos con una caridad con la que, según me consta, los venezolanos nos trataban a los colombianos.
Josefina Cámara
Abogada, criminóloga y escritora
México
México, 1968 Amigos del ‘Brief de Actual’: Deseo lo mejor para ustedes y sus seres queridos. Desde que estudié la Secundaria y la Preparatoria en mi querido país, México, me volví un apasionado de la Historia. En ambos colegios tuve dos admirables maestros de esa materia. Uno y otro nos enseñaron que el historiador debería ser, ante todo, totalmente imparcial y objetivo. Los que escriben la Historia, decía uno de ellos, deben ir a las fuentes originales y ser verdaderos investigadores. En la Historia moderna (cuando ya se cuenta con tantos medios para comunicar) el auténtico historiador debe entrevistar a los testigos de los hechos que ocurren a diario, especialmente aquellos que “pueden hacer Historia”. Pero desafortunadamente eso ya no funciona en nuestros días, como muchas otras cosas que eran – y siguen siendo – verdades, pero que ahora nos quieren “vender” como algo “progre”, es decir aceptar las sandeces que han proliferado en todas las esferas del acontecer humano (No hace mucho leí que ciertos “personajes” de la Política internacional declararon que el Holocausto en contra de los judíos en la Alemania Nazi no fue tal). Esta breve introducción la estoy haciendo por todo la publicidad que se hizo a principios de este mes en torno a los sucesos ocurridos en octubre del 68 en mi patria y los recuerdos que hay respecto a los 50 años de esos acontecimientos.. Ahora se nos quiere hacer creer que el “Movimiento del 68” en México fue un acto de libertad y los que iniciaron la revuelta – usando ellos primeramente la violencia – son verdaderos mártires, a los que se les debe rendir tributo y recordar como grandes “héroes”. Lo que nos quieren hacer creer sobre esos acontecimientos es otra gran mentira que mayormente esgrimen los eternos radicales e intolerantes del izquierdismo. Lo peor es que la gente –sobre todo la que nació después de la séptima década del siglo pasado– ha terminado por creerlo. Durante esos sucesos yo tenía 28 años de edad y recién había terminado mis estudios universitarios (en 1967). Yo fui un testigo de lo que realmente ocurrió, es decir, yo viví en carne propia el movimiento estudiantil del 68. Es preciso recordar que el comunismo de la Rusia Soviética de aquél entonces, mediante un congreso mundial, declaró que era el momento de propagar por todo el mundo esa doctrina de violencia, odio y destrucción. Baste con recordar el “mayo del 68” en París donde una revuelta igualmente estudiantil, fue una consigna soviética establecida en el congreso mencionado. Con eso en mente, los sucesos de octubre del 68 en México sirvieron como “pretexto” para igualmente realizar una asonada. Todo comenzó a fines de septiembre de ese año. Pasaban varias mujeres, estudiantes de una Preparatoria particular (incorporada a la Universidad Nacional Autónoma de México) por la avenida donde está a unas pocas cuadras una Vocacional del Instituto Politécnico Nacional (equivalente al Bachillerato). Algunos estudiantes de este Instituto comenzaron a hostigar a las muchachas, lo que hoy se llamaría “acoso sexual”. Las estudiantes fueron rápidamente a comunicar a sus compañeros de la Preparatoria lo ocurrido, mismos que en gran número fueron a entablar pelea con los del Politécnico que, obviamente, también formaban gran número Para explicar más detenidamente el asunto, es necesario aclarar que Politécnicos y Universitarios tradicionalmente han sido enemigos deportivos. En esta ocasión la enemistad se volvió incontrolable. El hecho es que unos y otros comenzaron a pelear de forma tan violenta que la Policía tuvo que intervenir para tratar de “calmarlos”. Entonces sucedió una gran paradoja. Los estudiantes de ambos centros educativos se unieron y comenzaron a agredir a la policía. Naturalmente era mayor el número de estudiantes y algunos elementos policíacos sufrieron lesiones, mayores o menores. La policía llamó a otras corporaciones y solamente así se detuvieron los sucesos originales. Pero no todo quedó así. Sea por consigna o por coincidencia (no tengo los elementos para determinarlo) el caso es ese episodio sirvió como “caldo de cultivo” para la izquierda radical de México. Los líderes políticos (marxistas, comunistas, socialistas, llámenle como quieran) comenzaron a decir que los estudiantes habían sido agredidos y que habían sido víctimas de “la brutalidad policiaca”. Así, comenzaron las manifestaciones. La que tuvo una mayor concentración se efectuó el 2 de octubre y hay que recordar que a México le habían otorgado la sede para los Juegos Olímpicos de ese año, los que se iniciaron el 12 de octubre de 1968. Todo estaba dispuesto para el evento deportivo internacional, excepto el problema de las “manifestaciones”. Entonces, el ejército mexicano se hizo cargo del asunto. Para empezar, el Gobierno prohibió todo tipo de manifestación, incluyendo la comentada del 2 de octubre. Eso enardeció más a los organizadores del ala radical izquierdista y a los integrantes, quienes de todos modos se reunieron en lo que se llama “la Plaza de las Tres Culturas” y se dio la orden de evitarla. Lo que aconteció es de sobra conocido. El ejército irrumpió con violencia y comenzaron las matanzas. Todo hecho donde hay muertos es lamentable y yo en lo particular estoy en contra de ello. Pero igualmente, debo repetir que fui testigo de los acontecimientos. Los estudiantes – o supuestos estudiantes contratados, ayer, hoy siempre, para fomentar el odio y la violencia - comenzaron a detener a los camiones repartidores de refrescos (lo que llaman sodas en otros países) para robarlos y también detuvieron autobuses de pasajeros (yo viajaba en uno de ellos) obligándonos a bajarnos pues los necesitaban, unos camiones para dar los refrescos a los manifestantes, y otros para transportarlos a los lugares donde se efectuaban las manifestaciones. Igualmente, yo fui testigo cuando los estudiantes de una escuela Vocacional preparaban en la azotea del edificio “bombas molotov” para arrojarlas en contra de los tanques del ejército. En ese entonces yo trabajaba en el edificio de enfrente de esa escuela Vocacional y veía a los estudiantes cometer esos actos vandálicos. Se podrá argumentar que había disparidad de fuerzas – en efecto, las había - pero los sucesos acontecidos no fueron iniciados por el Gobierno mexicano. Como dije al principio al escribir sobre los acontecimientos se debe ser objetivo e imparcial, sobre todo si un día esos sucesos formarán parte de la Historia. Para finalizar, debo dejar muy claro que ni el Gobierno debió de extralimitarse, matando a seres inocentes, o culpables, ni cierto número de manifestantes fue la víctima. Ambos fueron los causantes de la masacre. Pero tratar de torcer lo que es derecho es la “especialidad” de las personas que solamente quieren ver un solo lado de la moneda, aquellos que inventan “leyes de memoria histórica” –aunque se deberían llamar “leyes de falta de memoria histórica”– para después hacer que se lo crean las generaciones posteriores a los hechos relatados. Gracias por su paciencia y, como siempre, reciban un abrazo. Manuel Morales Chicago, Illinois
Felicidades a los Luciano y los Felicísimos en su onomástica. Envíame pistas de noticias, correcciones y sugerencias a brief@actuall.com. Descubre más historias en Actuall, únete a nuestra conversación en Twittery Facebook. Que pases un buen día actuando por las buenas causas. ¡Hasta mañana!
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