, 28 May. 20 (ACI Prensa).- El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social de Paraguay difundió el “Protocolo para instituciones religiosas ante la pandemia de Covid-19”.
Paraguay realizó un distanciamiento social durante 72 días. Tras presentar 900 casos y 11 fallecidos, el Gobierno anunció un levantamiento paulatino de la cuarentena bajo estrictas medidas sanitarias en forma experimental entre el lunes 22 de mayo y el jueves 11 de junio.
En ese contexto, el documento del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, actualizado el 22 de mayo, explica las estrategias que deben aplicarse en las instituciones religiosas para la prevención del coronavirus COVID-19, así como un protocolo de actuación ante un posible contagio.
En tanto, la Conferencia Episcopal Paraguaya precisó que bajo esa normativa solo se celebrarán los sacramentos de bautismos y matrimonios. Mientras que las Misas “continúan como hasta ahora a puertas cerradas” con transmisión por redes sociales.
Las recomendaciones del ministerio apuntan a que todos los participantes ingresen con mascarilla a las iglesias y otros espacios, que mantengan un lavado frecuente de manos con jabón, el distanciamiento de dos metros, evitar el contacto físico y no compartir el “mate o terere”, bebida característica de ese país.
En las reuniones deben participar hasta 5 personas y los servicios religiosos con un máximo de 10.
Se debe facilitar el equipamiento para marcar la circulación al interior de iglesias, la distancia mínima, mantener una ventilación constante y evitar el aire acondicionado y el ventilador, entre otras medidas.
También se debe proporcionar insumos como el alcohol gel, jabón, pañuelos desechables y desinfectantes para los espacios y equipamientos.
Asimismo, la institución recomienda que haya un “trabajo articulado con otras organizaciones para aprovechar mejor” las herramientas de comunicación, como por ejemplo: las transmisiones por redes sociales, la grabación de ceremonias, reuniones online, llamadas telefónicas, la radio, etcétera.
El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social también pide “incentivar la desestigmatización de la enfermedad y promover la solidaridad con los afectados”.
Revise en detalle el documento AQUÍ
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