En una entrevista a los medios de comunicación de su país, el P. Linero anunció que quiere “vivir la vida de otra manera” y “hacer otras cosas” en su vida. Además, dijo estar cansado de “las soledades” y “cosas que no entiende”, y no descartó la posibilidad de tener pareja.
En redes sociales, miles de seguidores se pronunciaron sobre esta decisión, algunos felicitando al presbítero colombiano y otros lamentando la noticia.
En su mensaje, Fray Nelson dijo de forma contundente: “Por misericordia nunca ha sucedido, pero si un día yo dijera que deseo dejar el sacerdocio, por favor no me feliciten; no me digan que soy ‘valiente’ ni que ‘comprenden’ mi honestidad: al contrario, oren, ayunen, exhórtenme con fuerza, ¡recuérdenme el precio de las almas! Gracias.
Cuando un usuario de Twitter le replicó, asegurando que sí felicitaba la decisión del Padre Linero “por su valentía y ganas de ser coherente”, Fray Nelson respondió que si bien el sacerdote colombiano “en su versión actual” estará “feliz” con esas palabras, recordó que “el camino de la subjetividad convertida en absoluto no es verdaderamente humano ni menos cristiano”.
Otro sacerdote que dio su punto de vista fue el P. Raúl Sánchez, de la Arquidiócesis de Oklahoma City (Estados Unidos), que aseguró este 6 de septiembre a través de su Facebook que “felicitar a un sacerdote por colgar la sotana, es igual que felicitar a un casado por su divorcio”.
Además, dijo que si bien las personas pueden decir “muchas cosas” sobre el caso del Padre Linero, “jamás van a saber, y sí lo sabrá el sacerdote que se retira, es que se fractura su vida, una parte de la vida de la Iglesia”.
Acerca de la soledad mencionada por el Padre Linero durante una entrevista radial, el P. Sánchez comentó que “un sacerdote que se siente solo, es que se vació de Cristo”.
“Eso da mucha tristeza. Lo que pasó y cómo pasó eso si no lo sabemos y entrar a especular en ello, no es útil”, añadió.
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