En el marco de la Primera Convención Internacional de la Familia, realizada en Guayaquil (Ecuador) el 24 de octubre, la Red de Restauración Civil, la plataforma A mis Hijos los Educo Yo, el Frente Nacional por la Familia de Ecuador y la Red Familiar de Principios Formativos denunciaron que “las altas funciones del Estado que nos gobiernan” someten a una “colonización cultural e imposición ideológica” a “nuestros niños, niñas y adolescentes, a través de leyes disfrazadas de Buen vivir, que excluye a la naturaleza humana y destierra a los padres en el ejercicio de su patria potestad”.
Denunciaron además y exigieron que sea derogada la sentencia No. 003-18-PJO-CC de la Corte Constitucional, emitida en julio de este año, “en la que se declaró que los padres no pueden interferir en la vida sexual de sus hijos menores de edad, y que, en el caso de hacerlo, el Estado será el salvador externo de los adolescentes”.
También advirtieron que “el actual Proyecto de reforma al Código Orgánico de la Salud, se ha insertado el ‘cannabis medicinal’, los vientres de alquiler, la confidencialidad del aborto, el cambio de sexo en menores de edad, la imposición de los métodos anticonceptivos a adolescentes, incluyendo la píldora de emergencia, medicamento altamente abortivo, todo esto, sin la autorización de los padres”.
Las plataformas demandaron al Poder Ejecutivo la destitución de los ministros de Educación y Salud, Fander Falconí Benítez y Verónica Espinosa Serrano, respectivamente, así como crear un Consejo Nacional de la Familia “ejercido por representantes de la sociedad civil que precautele los derechos de nuestros hijos y garantice las opciones pedagógicas que hemos escogido para ellos”.
“Los ecuatorianos necesitamos gobernantes que defiendan y garanticen el derecho a la vida desde la concepción, y el derecho de los padres de familia a educar a sus hijos bajo sus principios, convicciones y opciones pedagógicas”, aseguraron las plataformas defensoras de la familia.
En la Primera Convención Internacional de la Familia, que congregó a más de 1200 personas, participaron también los conferencistas y politólogos argentinos Agustín Laje y Nicolás Márquez.
A su turno, Laje denunció el discurso anti-científico de los ideólogos de género, y señaló los casos de varones que se “sienten” mujeres y compiten en las categorías femeninas de diversas competencias deportivas, así como hombres violadores que son enviados a cárceles de mujeres porque se “auto perciben” así.
“Cada uno puede auto percibirse como quiera pero de allí a que el Estado financie sus fantasías es otro asunto”, señaló.
Por su parte, Márquez aseguró que la ideología de género es un conjunto de ideas autoritarias que no previenen ningún mal social, como los casos de embarazo adolescente o de enfermedades de transmisión sexual.
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