Durante la Misa celebrada este jueves en la iglesia de San Pedro, el Arzobispo de Miami, Mons. Thomas Wenski, pidió para que los miembros del Congreso “muestren el coraje político para actuar en este tema vital de la reforma migratoria”. El Prelado señaló que el país no puede aceptar el trabajo e impuestos de los inmigrantes indocumentados sin ofrecerles la protección de la ley.
“Nuestro sistema migratorio es una mancha en el alma de nuestra nación. Como problema moral, debe ser cambiado. Debemos orar para que nuestros representantes reconozcan esto y tengan el coraje de reformarlo”, expresó Mons. Wenski.
Antes de la Eucaristía, los obispos se reunieron con un grupo de jóvenes que llegaron al país con sus padres cuando eran niños. Durante el encuentro, los prelados oyeron historias de cómo fueron separados de sus padres debido a las deportaciones.
La USCCB informó que tras la Misa, los obispos tenían programado visitar a varios miembros de la Cámara de Representantes, incluyendo al portavoz John Boehner, para urgirles que consideren la reforma migratoria tan pronto como sea posible.
“La hora de actuar es ahora”, afirmó el Obispo Auxiliar de Seattle y presidente de la Comisión de Migración del Episcopado, Mons. Eusebio Elizondo, quien advirtió que dilatar esta reforma “es inaceptable”.
En la Eucaristía también estuvieron presentes los obispos que el 1 de abril celebraron una Misa en la frontera con México, en la que recordaron a los inmigrantes muertos en su intento por ingresar al país.
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