Al día siguiente de regresar de Tierra Santa, el Papa Francisco almorzó con los obispos de la presidencia del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), en la Casa Santa Marta.
“Le preguntamos concretamente por el gesto que tuvo allá de rezar en el muro de separación entre Palestina e Israel, y dice que le salió espontáneo. ‘De repente vi el muro, y me vino la idea. ¿Por qué no me paro a rezar aquí?’. Y se puso a rezar”, explicó Mons. Carlos Aguiar Retes, Presidente del CELAM, en declaraciones a ACI Prensa el 27 de mayo en Roma.
“Yo creo que hay paralelismos a otros muros y tantos que tienen que caer para que nuestra humanidad sea verdaderamente global, y no solamente en el aspecto económico o por intereses económicos”, indicó el Arzobispo.
“El Papa viene muy contento, muy tranquilo, ha sido muy intenso muy emotivo, y me parece que cumplió los objetivos perfectamente de conmemorar los 50 años de reencuentro de Pablo VI con el Patriarca Atenágoras, y de ser un peregrino para orar, para rezar por la paz”, añadió.
El Vicepresidente del CELAM, Cardenal Rubén Salazar López, quien también compartió almuerzo con el Santo Padre, explicó a ACI Prensa, que “a pesar de que llegó anoche tarde de su viaje por el Medio Oriente, el Papa estaba muy bien, muy fresco, muy alegre de su viaje”.
El Cardenal Salazar, quien además es Arzobispo de Bogotá, Colombia, añadió que el Papa Francisco “siempre es muy cercano, muy amable y hemos charlado un poco de todas las cosas importantes que tenemos en la cabeza. Todo lo que en este momento preocupa a la Iglesia”.
La presidencia del CELAM estuvo en Roma del 19 al 29 de mayo para informar como cada año, sobre el servicio que se realiza con los episcopados de América Latina, así como compartir orientaciones y preocupaciones relativas al camino de la Iglesia en esa región.
Publicar un comentario