La increíble historia del bebé que salvó su vida por 48 horas

Una historia llena de vida. Los médicos del Reino Unido han conseguido salvarle la vida a un bebé prematuro cuyo tamaño de pies era como el de un céntimo. Este 'milagro' llegó dos días después de que expirara el plazo para abortar. Victoria Bradley, una británica de 37 años natural de Liverpool ha vivido una historia que no olvidará jamás. Tras sufrir problemas en los ovarios, los médicos llegaron a asegurarle que nunca podría tener hijos, pero el año pasado se llevó la alegría de su vida junto a su marido al recibir la buena noticia de su embarazo. Tal y como publica el Daily Mail, no fue un embarazo normal. Su hija, Francesca Bradley-Curran, nació antes de tiempo, a los seis meses y 48 horas. Tan solo dos días después de la fecha límite en Reino Unido para abortar a petición.

Si Francesca hubiera nacido antes de las 24 semanas, los médicos no estaban obligados a atenderla

En Gran Bretaña es legal abortar hasta la semana 24 de embarazo. Sin embargo, puede realizarse más adelante si corre riesgo la vida de la madre. Además, si un bebé nace antes de la semana 24, los médicos británicos no están obligados a prestarle soporte médico ya que se considera que hay pocas probabilidades de vida. Francesca se salvó por dos días. "No pensaba que estaría aquí. Da miedo pensar que se hubiera nacido justo dos días antes, no habrían tratado de salvarla", aseguró Victoria. [caption id="attachment_56937" align="aligncenter" width="634"] La pequeña Francesca siendo tratada / Daily Mail[/caption] Cuando nació, Victoria solo pudo ver a su hija durante tres horas y media. Las enfermeras se llevaron a la pequeña rápidamente a cuidados intensivos. "Creía que seguiría pareciendo un feto, su piel era transparente, no tenía pestañas ni cejas. Sus ojos no estaban abiertos todavía", relata la madre. Gracias a que nació "fuera de límite", un equipo de 15 médicos y enfermeras luchó para salvar la vida de Francesca. Tuvieron que emplear 11 minutos de maniobras para que respirara por primera vez.

"Nos dijeron que había que valorarlo cada hora, y que no creían que sobreviviría. Su sangre estaba llena de infecciones", declara Victoria

"Nos dijeron que había que valorarlo cada hora y que no creían que sobreviviría. Su sangre estaba llena de infecciones", explica su madre, Victoria. Tal era el pesimismo, que las enfermeras del hospital le facilitaron una foto de los pies de su niña, en la que se observa su minúsculo tamaño. Francesca tuvo hasta 15 transfusiones de sangre y una operación en los ojos. [caption id="attachment_56926" align="aligncenter" width="634"] La fotografía de los pies de Francesca que muestra el pequeño tamaño que tenía al nacer / Daily Mail[/caption] Además, en sus primeras semanas de vida, la pequeña tuvo que enfrentarse a meningitis, sepsis, dos colapsos en los pulmones y problemas renales. "Ella era más fuerte cada día, sino otra cosa hubiera pasado", explica Victoria. Ocho semanas después de nacer, Francesca pudo salir de la incubadora. Fue dada de alta 17 semanas después y es considerada por todos como un milagro. Los médicos aseguran que ya no necesita medicinas ni máquinas para poder respirar. No hay duda de que Victoria va a tener my vivo el recuerdo de estas semanas en su memoria, pero también lo quería en su piel. Por eso se tatuó la foto de los pies de su hija, la misma que las enfermeras le dieron cuando pensaban que no se podría hacer nada.

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