Al presidir la Misa este 2 de septiembre en la Catedral Primada de México, el Cardenal Aguiar aseguró su “comunión, fidelidad y solidaridad al Papa Francisco, a quien agradezco su serenidad y paz ante las acusaciones que injustamente se le han atribuido”.
El purpurado mexicano se refería así a las acusaciones que el ex nuncio en Estados Unidos, Mons. Carlo Maria Viganò, hizo recientemente contra el Papa Francisco y diversos cardenales, obispos y sacerdotes.
El 25 de agosto, Viganò publicó un “Testimonio” de 11 páginas, responsabilizando a diversos sacerdotes, obispos y cardenales de encubrir las denuncias de abusos sexuales que pesan sobre el ex cardenal Theodore McCarrick, Arzobispo Emérito de Washington.
El ex nuncio en Estados Unidos dijo además que poco después de su elección, en marzo de 2013, el Papa Francisco levantó supuestas sanciones que su predecesor, Benedicto XVI, le habría impuesto a McCarrick y lo habría convertido en “su consejero de confianza”.
En su homilía, el Cardenal Aguiar hizo un llamado “a unirnos especialmente en oración a Dios, Nuestro Padre, para que fortalezca al Papa Francisco con la asistencia del Espíritu Santo, y lo llene de confianza en las palabras que Jesucristo dirigió a Pedro, y en ellas a sus sucesores: tú eres Pedro, y y sobre esta roca edificaré mi Iglesia y los poderes del mal no la vencerán”.
En la ceremonia, celebrada este mediodía en la capital mexicana, el Cardenal Aguiar recibió la imposición del Palio Arzobispal de manos del Nuncio Apostólico, Mons. Franco Coppola.
El Arzobispo Primado de México agradeció además a los laicos, sacerdotes y obispos presentes, entre ellos su predecesor, el Cardenal Norberto Rivera, y les invitó “a vivir con coherencia y fidelidad la obediencia a la Palabra de Dios, y así, nos ayudemos para dar testimonio de unidad y comunión eclesial”.
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