Barbara Castelli – Ciudad del Vaticano
Una vida gastada al servicio de la Iglesia y del Papa. El Cardenal Achille Silvestrini, Prefecto emérito de la Congregación para las Iglesias Orientales, falleció hoy en Roma a la edad de 95 años. Siempre atento a las personas, con la mirada puesta en la cuestión de la juventud, antes que en los documentos, llevó a cabo durante décadas con escrúpulo y rigor diversas tareas diplomáticas para la Santa Sede. Estrecho colaborador de los Secretarios de Estado Domenico Tardini y Amleto Giovanni Cicognani, entre otras actividades, trabajó con el entonces Arzobispo Agostino Casaroli durante la Ostpolitik y dirigió las negociaciones con las autoridades italianas para la revisión del Concordato lateranense.
Siendo joven sacerdote
Nacido en Brisighella, en la diócesis de Faenza, el 25 de octubre de 1923, entró en el Seminario Diocesano cuando tenía 19 años. Allí mismo fue ordenado sacerdote por el Obispo Giuseppe Battaglia, el 13 de julio de 1946. Se matriculó en la Facultad de Letras y Filosofía de la Universidad de Bolonia, donde se licenció en Literatura Clásica, con una tesis sobre "El Estatuto Fundamental de los Estados de la Santa Iglesia". Enviado a Roma en 1948, se matriculó en el Pontificio Seminario de Estudios Jurídicos de San Apollinare, asistiendo a la Universidad Pontificia Lateranense, donde se graduó en Utroque iure.
Al servicio de una diplomacia de la escucha y del diálogo
En 1952 se inscribió en la Pontificia Academia Eclesiástica, para entrar, el 1° de diciembre de 1953, en el servicio diplomático de la Sección para los Asuntos Eclesiásticos Extraordinarios de la Secretaría de Estado, donde se ocupó de Vietnam, China e Indonesia y, en general, el sudeste asiático. De 1958 a 1969 fue uno de los colaboradores de los Secretarios de Estado Domenico Tardini y Amleto Giovanni Cicognani. De regreso al Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia – nueva denominación que tomó la Sección de Asuntos Eclesiásticos Extraordinarios – se ocupó del sector de las organizaciones internacionales (paz, desarme y derechos del hombre). En 1971 acompañó al Arzobispo Agostino Casaroli en su visita a Moscú, para depositar el instrumento de adhesión de la Santa Sede al Tratado de No Proliferación de armas nucleares. En 1972 fue nombrado delegado añadido a las consultas de Helsinki en preparación para la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa, y posteriormente participó en todas las fases de la Conferencia de Helsinki y de Ginebra. En 1977 fue Jefe adjunto de la Delegación en la Reunión de Belgrado para la verificación y desarrollo del Acta Final de Helsinki.
La sensibilidad de quienes piensan en la vida de las personas
En julio de 1973 fue nombrado Subsecretario del Consejo para los Asuntos públicos de la Iglesia, donde asumió el cargo de Secretario el 4 de mayo de 1979. Ascendido al episcopado con el título arzobispal de Novalcina, recibió la ordenación el 27 de mayo de manos de San Juan Pablo II. Su nuevo cargo lo llevó a dirigir, desde 1979, la delegación de la Santa Sede para la revisión del Concordato lateranense, negociaciones llevadas a cabo con las autoridades italianas hasta la firma del Acuerdo del 18 de febrero de 1984. Durante esos años llevó a cabo innumerables misiones diplomáticas: representante de la Santa Sede en Madrid en la reunión para la seguridad y la cooperación en Europa (1980-83); enviado a Malta (1981); a Buenos Aires, por la crisis de Malvinas-Falkland (1982); a Nicaragua y El Salvador (1983); a Polonia (1983); a Estocolmo, como Jefe de la delegación de la Santa Sede para la sesión inaugural de la Conferencia sobre Desarme en Europa (1984); a Helsinki, para la celebración del décimo aniversario de la firma del Acta final de la Conferencia para la Seguridad y la Cooperación en Europa; de nuevo a Malta, para la definición de un Acuerdo sobre las escuelas de la Iglesia (1985); a El Líbano y Siria (1986) y nuevamente a Polonia (1987).
Una mirada atenta al mundo juvenil
También San Juan Pablo II lo creó Cardenal en el Consistorio del 28 de junio de 1988, de San Benito fuori Porta San Paolo, acontecimiento que precedió por tres días su nombramiento como Prefecto del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica. Del 24 de mayo de 1991 al 25 de noviembre del año 2000 fue Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales. En su ministerio sacerdotal realizó una acción entre los jóvenes en "Villa Nazaret", Institución creada en 1945 por el Cardenal Tardini. Desde 1969, animó una "Comunidad" surgida a partir de un grupo de exalumnos de posgrado, profesionales y amigos de “Villa Nazaret”. De aquí nació, en 1986, la Fundación "Comunidad Domenico Tardini", que se encarga de las actividades de formación y gestión por cuenta de la Fundación “Sagrada Familia de Nazaret”. El Cardenal Silvestrini ocupó el cargo de presidente de ambas Fundaciones.
Nueva composición del Colegio Cardenalicio
Achille Silvestrini era un Cardenal no elector. Con su fallecimiento, el Colegio Cardenalicio resulta compuesto ahora por un total de 215 Purpurados, de los cuales 118 son electores y 97 no electores.
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