El pasado 27 de febrero se eligió como nuevo drag queen del Carnaval de las Palmas de Gran Canaria en España, a drag Sethlas que se presentó con un número blasfemo titulado “¡Mi cielo yo no hago milagros. Que sea lo que Dios quiera!”.
En el espectáculo blasfemo el drag queen llegó vestido como la Virgen María, mientras sonaba la canción “Like a prayer” de Madonna, y en otro momento se mostraba crucificado y con una corona de espinas, en referencia a la crucifixión del Señor. Estaba además acompañado de un grupo de bailarines disfrazados como los “nazarenos” de las procesiones religiosas.
Según destaca Europa Press, el director de La 2, Juan Manuel Hidalgo, indicó que la señal del evento venía de la televisión canaria y que TVE se limitó a difundirla al resto del país.
Hidalgo también añadió que la televisión pública desconocía el contenido de la gala, tan solo sabían el orden de las actuaciones.
La gala fue retirada del sitio web RTVE ya que “podía herir la sensibilidad de un amplio sector de la sociedad”.
El director de RTVE Digital, Alejandro Vega, aseguró que tomó esa decisión según el manual de estilo de la organización en lo referente a contenido especialmente sensible sobre confesiones religiosas y en el que se subraya que la televisora debe velar por “el respeto, igualdad e imparcialidad a todas las creencias y prácticas religiosas”.
En ese sentido, Vega recordó que ya en agosto de 2015 se eliminó de la web de RTVE un programa que ofendía a los judíos.
Respuestas a la actuación blasfema
Como respuesta a esta actuación, cerca de 47 mil personas se unieron a una recogida de firmas iniciada por la Asociación Enraizados en la que se pedía al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, organizador de la gala, que asuma su responsabilidad por el espectáculo blasfemo.
La Asociación Española de Abogados Cristianos pidió a la Fiscalía que estudiara si esta actuación constituía un posible delito de odio por herir los sentimientos religiosos. A pesar de la ofensa, la Fiscalía no aceptó la denuncia y archivó el caso.
Numerosos obispos españoles también mostraron su rechazo al show blasfemo. El Presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Cardenal Ricardo Blázquez, hizo un llamamiento “al respeto de los sentimientos religiosos”.
El portavoz de la CEE, P. José María Gil Tamayo, también aseguró su oración, mientras que el Obispo de Canarias, Mons. Francisco Cases, celebró una Eucaristía en desagravio.
En una carta dirigida a los fieles, Mons. Cases preguntó si todo vale en las manifestaciones festivas y si no existen límites en la libertad de expresión de las personas.
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Con esta carta sacerdote insta a drag queen a pedir perdón por blasfemia https://t.co/bABJGd52Yg
— ACI Prensa (@aciprensa) 4 de marzo de 2017
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