El libro sobre el obispo francés aparecerá ya muy pronto. Hoy estaba reordenando las notas que no puse en el libro. Os las pongo aquí, porque, de lo contrario, quedarán sepultadas en el olvido y alguna de ellas es muy interesante.
Por ejemplo, Joseph Bergin en su libro The making of the French Episcopate, dice que cuando un nuncio intentó investigar la vida de algunos candidatos al episcopado, el parlamento de París:
…challenged papal activities and declared that the nuncio was engaging in an unacceptable exercise of papal jurisdiction by conducting such enquiries in France.
¡¡Un acto de jurisdicción recoger información antes de confirmar un nombramiento!! Increíble.
Otro hecho interesante, cuando un monje como Charles de Saint-paul fue nombrado obispo de Avranches, tuvo que ser su madre la que pagara 10.000 libras para las provisiones papales. Otro dato curioso, a un candidato se le quiere dar una diócesis. Como el cardenal Mazarino no lo logra, le compensa con una abadía. ¿Os imagináis que un buen día yo, el autor de este blog, os anuncio: “¡Me han nombrado abad! Tengo 60 monjes a mi cargo. Aunque no pienso residir en la abadía”. Sí, la Iglesia de Francia llegó a lo más bajo en esa época.
Una curiosidad es que las sedes episcopales de Oloron y Lescar nunca habían formado parte de la iglesia francesa. Durante el siglo XVI, eran nombrados por el papa “at the supplication” of the kings of Navarre, princes of Bearn, who ensured that the sees were dominated by members of the ruling Foix-Albret family (cita del libro antes mencionado de Joseph Bergin).
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