Según informa el diario de los obispos italianos Avvenire, el bebé de cuatro meses fue encontrado por el sacerdote en buen estado de salud en el atrio de la parroquia María Santísima del Arco di Frignano, en Casertano.
El pequeño fue llevado a la sección de pediatría del hospital Moscati di Aversa en donde estará algunos días para asegurar que todo esté bien.
Las autoridades están investigando para tratar de dar con los padres del niño, pero hasta el momento no han logrado tener información al respecto.
El alcalde de Frignano, Gabriele Piatto, junto a un grupo de voluntarios de la parroquia están distribuyendo una foto del pequeño con la esperanza de que alguien pueda reconocerlo.
El sacerdote Roberto Caterino, que encontró al bebé, dijo que espera “que los padres piensen mejor su decisión y que sepan que estamos dispuestos a ayudarlos”.
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