¡Quemados vivos por ser cristianos!








Punjab (Pakistán) (AICA): Una pareja cristiana, él de 26 años Shahzad, y ella embarazada de 24 años, Shama, fueron quemados hasta la muerte por una turba musulmana, de cinco aldeas al sur de Lahore (provincia de Punjab), que los habían acusado de haber cometido blasfemia, al quemar unas páginas del Corán. Lo comunicó a la Agencia Fides el abogado cristiano Sardar Mushtaq Gill, defensor de los derechos humanos, que fue llamado por otros cristianos y fue testigo del trágico suceso, en el pueblo Chak 59, cerca de la ciudad de Kot Radha Kishan, al sur de Lahore.



Una pareja cristiana, él de 26 años Shahzad, y ella embarazada de 24 años, Shama, fueron quemados hasta la muerte por una turba musulmana, de cinco aldeas al sur de Lahore (provincia de Punjab), que los habían acusado de haber cometido blasfemia, al quemar unas páginas del Corán. Lo comunicó a la Agencia Fides el abogado cristiano Sardar Mushtaq Gill, defensor de los derechos humanos, que fue llamado por otros cristianos y fue testigo del trágico suceso, en el pueblo Chak 59, cerca de la ciudad de Kot Radha Kishan, al sur de Lahore.

Ambos trabajaban en una fábrica de arcilla, el 2 de noviembre fueron secuestrados y mantenidos como rehenes en el interior de la fábrica durante dos días. Ayer por la mañana, a las 7, fueron empujados dentro de un horno donde se cuecen los ladrillos.




Según explicó a Fides el abogado Gill, el episodio que desencadenó la acusación de la supuesta blasfemia, está referido a la muerte reciente del padre de Shahzad. Hace dos días, Shama, al limpiar la casa del hombre, tomó algunos artículos personales, documentos y hojas que consideró inútiles e hizo un pequeño fuego. Según un hombre musulmán que fue testigo de la escena, en ese fuego había páginas del Corán.




El hombre extendió la voz en los pueblos de los alrededores y una multitud de más de 100 personas tomaron como rehenes a los dos jóvenes. La policía, alertada por otros cristianos, intervino para denunciar el asesinato y arrestar, para una primera declaración, a 35 personas.




El abogado Gill dice a Fides: “Es una tragedia, un acto bárbaro e inhumano. El mundo entero debe condenar enérgicamente este episodio que demuestra que en Pakistán se incrementó la inseguridad entre los cristianos. Basta sólo una acusación para ser víctimas de ejecuciones extrajudiciales. Veremos si alguien será castigado por este asesinato”.+







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