La ley 15.100, iniciativa del diputado Federico Susbielles, fue aprobada el 23 de noviembre y promulgada el miércoles 26 de diciembre. La norma busca dar cumplimiento a lo estipulado en la Ley Nacional de Identidad de Género 26.743, promulgada en 2012, respecto al acceso al deporte.
“La Ley de Identidad de Género fue de avanzada, pero necesita de este tipo de normas complementarias porque sino se sigue discriminando a estos colectivos”, dijo el diputado Sebellies a la agencia Télam el 23 de noviembre. Se trata de “garantizar un derecho humano y de dar cumplimiento a una norma de mayor rango, que permite seguir garantizando derechos”, agregó.
La norma sostiene que “a los fines de la registración, inscripción, participación y competición en el marco de las actividades deportivas, de una liga, federación o confederación en el territorio provincial, sea de carácter amateur o profesional, se entenderá por género a aquel que fuera autopercibido por la persona deportista”.
Asimismo, establece que será “considerada discriminatoria toda acción u omisión que impida el libre desarrollo de las actividades enumeradas en razón al género auto percibido”.
El Instituto Bonaerense del Deporte sancionará a los clubes, ligas, asociaciones y federaciones que impidan la participación de deportistas bajo esta norma o los inscriban en un “género” distinto al autopercibido.
Según esta ley, si una persona es hombre y desea jugar en un equipo de mujeres porque se percibe como tal, entonces podrá jugar en la liga femenina del deporte en el que quiera participar.
Ese es el caso de Saira Millaqueo, con el que se inició el debate legislativo en 2017. Este hombre transexual recurrió a la justicia para poder unirse a una liga de hockey femenino y tras varios intentos logró su objetivo.
Susbielles explicó que pesaban sobre Millaqueo excusas, “por ejemplo, aferrándose al estatuto internacional, le pedían demostrar cierta cantidad de testosterona mediante un análisis para comparar el nivel de hormonización”.
Con la nueva ley “se busca contribuir a la erradicación de prácticas discriminatorias y violentas en nuestra sociedad”, dijo el diputado a Télam.
La aprobación de la ley provocó distintas reacciones, entre ellas la de Patricia Navarro, jugadora del Trelew Rugby Club, quien rechazó la iniciativa y aclaró que “esto no es una cuestión de discriminación”.
“Nos da miedo jugar en este deporte de roce porque aunque es transexual su fuerza es de un hombre”, dijo Navarro al diario Clarín.
“En el último partido que jugamos con Germinal perdimos 3 a 0 con tres goles de Jessica porque nadie se acercaba para marcarla”, sostuvo la deportista.
Patricia Navarro se refirió a Jessica Millamán, un jugador transexual que se unió a una liga de hockey amateur femenina de la provincia de Chubut.
Estrategia ideológica
El pasado 15 de diciembre miles de argentinos se manifestaron públicamente contra la ideología de género en distintas ciudades del país.
En Buenos Aires, los participantes se reunieron en el llamado “Familiazo”, frente al Congreso de la Nación para expresar su firme defensa de la familia y su condena a la ideología de género al ser un enfoque considera el sexo como algo que tiene un origen sociocultural y no natural o biológico.
Desde Salta, el diputado Andrés Suriani dijo al diario El Tribuno que la provincia “es trinchera de valores, por eso le decimos sí a la vida, sí a la familia y no a la ideología de género que creemos que va en contra de la soberanía nacional”.
La ideología de género o el enfoque de género es una corriente que considera que el sexo no es una realidad biológica sino una construcción sociocultural. Actualmente varios gobiernos intentan imponerla a través de la educación de los niños y jóvenes; y a través de leyes como la que acaba de ser aprobada en Buenos Aires.
Publicar un comentario