Pastoral Vocacional
Durante las semanas anteriores hemos conocido algunos medios por los que podemos auxiliarnos para discernir nuestra vocación.
En esta ocasión nos centraremos en la Reflexión.
“¿Quién de ustedes, queriendo edificar una torre, no se sienta primero a calcular los gastos y ver si tiene para acabarla? No sea que, habiendo puesto cimientos y no pudiendo terminar, todos los que lo vean se pongan a burlarse de él, diciendo: Este comenzó a edificar y no pudo terminar”. (Lc.14, 28-30).
La vocación es una empresa demasiado grande; ¡y es para toda la vida! Por eso, no te puedes lanzar a ella sin antes haber reflexionado seriamente, y con la debida calma, sobre ti, sobre el llamado que Dios te hace y tú quieres seguir.
Debes reflexionar sobre cuáles son tus capacidades y limitaciones; ¿Serás capaz de ser fiel a los compromisos que implican la vocación? ¿En qué signos concretos te basas para pensar que Dios te llama? ¿Qué es lo que más temes de la vocación? ¿Cuáles son las razones a favor y en contra que tienes para emprender ese camino? ¿Qué es lo que te atrae de ese estado de vida, y qué es lo que no te gusta de él?
Dios te pide que te comprometas responsablemente en el discernimiento de su voluntad, Él quiere que tú pongas en juego tu inteligencia y tu capacidad de reflexión y juicio para que puedas encontrar tu vocación. Él te da la luz del Espíritu Santo para que descubras qué es lo que quiere de ti.
No debes pretender, ilusoriamente, tener en mano un contrato firmado por Dios, en el que revela su plan sobre ti, y de esa manera poseer la evidencia de su llamado. No; nunca se te dará tal documento. Lo que encontrarás serán signos que te indiquen cuál podría ser la voluntad de Dios; signos que deberás descifrar para así tener la certeza (más no la “evidencia”) de su llamado.
En este nivel llegarás a decidir; “Creo que Dios me llama”, “Creo que, con la ayuda de Dios, podré responder”.
Sin duda que es necesario buscar los espacios y el tiempo necesario, propiciando ambientes de silencio exterior e interior que te faciliten hacer conexión con Dios y conocerte a ti mismo, también estar atento y con espíritu de fe descubrir la presencia de Dios en tu vida y la forma como Él te invita a colaborar en la construcción de su Reino poniendo al servicio las capacidades que Él te ha dado.
Vence el reto, sé de los y las jóvenes que se comprometen a discernir su Vocación y así tener mayor claridad sobre el proyecto de Dios en su vida vida.
Hay algunas actividades para los jóvenes que quieren darse la oportunidad de reflexionar, si deseas información puedes contactarnos al correo [email protected], o llámanos al teléfono 36173075. También estamos en Facebook como Jesús Amigo Llama.
Publicar un comentario
Click to see the code!
To insert emoticon you must added at least one space before the code.