Querida Lupita:
He pensado varias veces en separarme de mi esposo porque siento que es desconsiderado conmigo. No me valora, no me trata con respeto. He seguido tus publicaciones y me doy cuenta que no tengo que quedarme amargada en esta relación pero tampoco es opción el divorcio. Estoy decidida a luchar por la unidad de mi familia ya que tenemos 4 hijos entre 4 y 12 años. Pero, cómo puedo hacerme escuchar por mi marido, cómo puedo hacerle saber mis necesidades sin que haga oídos sordos como siempre.
Ma. Del Carmen Z.
Querida Marycarmen:
Conocer nuestras necesidades emocionales es un acierto, y hacer conciencia de que esas mismas necesidades las tiene nuestro cónyuge es una bendición.
Necesito ser valorada y tratada con respeto y consideración. ¡Cierto!, y también tu esposo lo necesita.
Las razones por las que se cierra el canal de la comunicación en pareja son:
Porque uno de los dos o ambos recurren a un bombardeo de quejas y acusaciones
Porque hay descalificaciones y humillaciones por parte del otro en la conversación
Porque regañas, sermoneas y corriges Porque entre súplicas y críticas hay una exacerbación de los sentimientos y se presentan gritos e insultos
Conociendo lo anterior, lo primero a tomar en cuenta es evitar dichas actitudes de tu parte hacia tu esposo. Tampoco él debe presentar estas faltas ante ti, y lo vas a conseguir con tu ejemplo. La Palabra de Dios nos dice: Si un esposo no cree por la palabra, será ganado sin palabras por la conducta de sus esposas (1 Pe. 3). Y Jesucristo nos da un principio fundamental para mejorar nuestras relaciones humanas: haz a los demás todo lo que quieras que te hagan a ti (Mt. 7, 12).
Enseguida nos toca cuidar los tres aspectos claves para que nuestra voz sea escuchada, de acuerdo con el Dr. James Dobson, experto en educación familiar:
Momento favorable. Puede ser después de la cena o cuando se apaguen las luces por la noche, tal vez al comienzo del nuevo día. Observar cuando el esposo esté de buen humor y se muestre interesado.
Ambiente correcto. Vayan juntos y solos a pasar la noche fuera de casa, un fin de semana para los dos sería ideal. Pueden acudir a un encuentro matrimonial si creen que hace falta dirección u orientación para tocar temas delicados.
Manera apropiada. Que no sea un ataque personal sino un encuentro en el que te abres a expresar tus sentimientos en primera persona y sin ofender. No se trata de hablar de las incapacidades o defectos de él sino de tus propios miedos, inseguridades y necesidades. En todo momento muéstrate cariñosa, agradable y comprensiva.
Para comunicarnos mejor necesitamos recordar que estamos en el mismo equipo. Un matrimonio es equivalente al equipo que hace un capitán de barco con su primer oficial. Ambos luchan por hacer la travesía con éxito hasta llegar a puerto seguro. No me voy a pelear con el capitán sino que buscaré junto a él la mejor estrategia para que nuestra embarcación no se hunda. Debemos tener claro nuestro destino y comprometernos a permanecer unidos para llegar a él.
Parafraseando al novelista francés, Anatole France, te comparto esta frase motivadora: Para lograr grandes cosas no solo debemos actuar sino también soñar, no solo debemos planear sino también crecer.
Cree firmemente que puedes lograr la unidad de tu familia con tu determinación y la infalible ayuda de Dios.
Publicar un comentario