Esta cruz, erigida en los años 40, recordaba a los asesinados en el municipio durante la Guerra Civil, dos de ellos sacerdotes.
La Plataforma de Defensa de la Cruz defendía el carácter exclusivamente religioso de la cruz ya que se retiraron las inscripciones que aludían a José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española, partido al que pertenecía Francisco Franco.
Durante la tarde del domingo 28 de enero, un numeroso grupo de habitantes de Callosa de Segura se concentraron en la plaza de la iglesia para evitar su retirada y para mostrar también su descontento con el alcalde de la localidad, Francisco José Macià, que ha permitido y abanderado la remoción del símbolo religioso.
Los vecinos de Callosa de Segura llevaban 400 días turnándose para evitar que la cruz fuera retirada y habían evitado hasta en tres ocasiones que la cruz fuera retirada.
Horas más tarde, sobre las 12 de la noche, agentes de la Policía desalojaron la plaza pero unas decenas de personas han permanecido en los alrededores durante toda la noche. Dos personas han sido arrestadas por negarse a abandonar el lugar.
A las 4:00 a.m. comenzaron los trabajos previos del desmontaje y finalmente a las 6:00 a.m. se retiró tanto la cruz y como el pedestal, ambos de mármol blanco.
La Asociación Española de Abogados Cristianos ha informado en un comunicado que “presentará una querella por prevaricación contra el alcalde de Callosa de Segura por la retirada de la cruz de la plaza de la iglesia”.
En el comunicado, el abogado encargado del caso, Juan José Liarte, anunció que “Abogados Cristianos va a perseguir a los responsables del derribo de la cruz si conseguimos demostrar que se ha hecho ilegalmente” y precisó que “se pedirán responsabilidades personales y patrimoniales, pero también penales”.
Polonia Castellanos, presidenta de Abogados Cristianos, censuró la actuación de la justicia y además aseguró que esta retirada es “una muestra más del odio visceral a la cruz” .
El pasado miércoles la sala de lo Contencioso-Administrativo desestimó la petición en la que Abogados Cristianos reclamaba una serie de medidas para evitar la inminente destrucción total o parcial de la cruz objeto de las actuaciones. Sin embargo, esta sala denegó las medidas cautelares porque no apreciaba “especial urgencia”.
Según informa Actuall, la sala de lo Contencioso-Administrativo tenía constancia de que el Ayuntamiento había solicitado a la Delegación del Gobierno un dispositivo para llevar a cabo el derribo.
La sala requirió al Ayuntamiento que le comunicara la decisión si llevaba a cabo el derribo antes del 31 de enero de 2018, que era la fecha prevista para la deliberación y resolución del procedimiento.
El Ayuntamiento comunicó el pasado viernes a última hora la determinación de derribar la cruz y la sala no tomó ninguna decisión o acción al respecto.
Según señalan desde Abogados Cristianos, la retirada de la cruz se ha llevado a cabo aunque hay procedimientos judiciales todavía por resolver.
Además, desde la Plataforma por la defensa de la Cruz, representada en los tribunales por la Asociación de Abogados Cristianos, aseguraron que solicitarán de nuevo al tribunal Superior de Justicia de Valencia “medidas cautelares para mantener lo que queda de la cruz, y si la justicia les da la razón, que restituyan el monumento en su lugar lo antes posible”.
Ley de Memoria histórica
La Ley de Memoria Histórica fue aprobada en el año 2007 y establece una serie de medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil española y la posterior dictadura de Francisco Franco.
Entre esas medidas se establece la retirada de monumentos, símbolos o nombres de lugares públicos relacionados con la Guerra Civil y la dictadura. Se trata de una ley controvertida porque no favorece la reconciliación de los españoles.
Sin embargo, los monumentos de la Iglesia católica quedan fuera de la aplicación de esta ley, algo que no se ha respetado, como es el ejemplo de la cruz de Callosa de Segura.
En ocasiones anteriores, los habitantes de Callosa de Segura habían declarado que la cruz situada en la plaza de la Iglesia era “parte de la identidad histórica, cultural y espiritual” y una presencia que “ha sido y es aceptada mayoritaria y popularmente aceptada en toda la ciudad”.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 17 de diciembre de 2016
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