“Salgamos al encuentro de los demás con ternura y con el perdón para expresar nuestra fe. Los gestos del Papa han sido muchos: con los niños, con los enfermos, con los ancianos, con nuestros hermanos nativos en la selva, con los jóvenes. Gestos que son visibles a los demás y que expresan el amor a Dios y al prójimo que preside la misión del Papa y marcan un camino a seguir”, indicó el Purpurado en una carta pastoral.
El texto, leído este domingo 28 en las parroquias de la Arquidiócesis de Lima, afirmó que la visita apostólica del Papa, que estuvo en Perú del 18 al 21 de enero, fueron “días llenos de gozo en los que hemos sentido arder en nuestros corazones la fe y el amor a la Iglesia y al Vicario de Cristo”.
En ese sentido, el Cardenal Cipriani compartió con los fieles las palabras de Francisco, que agradeció “la oportunidad de poder ‘tocar’ la fe del Pueblo, de ese Pueblo que Dios les ha confiado”.
“Realmente aquí no se puede no tocar. Si vos no tocás la fe del Pueblo, la fe del Pueblo no te toca a vos; pero estar ahí, viendo las calles repletas, es una gracia y hay que ponerse de rodillas”, le compartió el Papa al Arzobispo de Lima.
En ese sentido, continuó el Cardenal, “nos aconseja el Papa: ‘Jesús sigue caminando por nuestras calles, sigue al igual que ayer golpeando puertas, golpeando corazones para volver a encender la esperanza y tantos anhelos”.
Además, Francisco invita a abrir el corazón “en la vida cotidiana del trabajo rutinario, en la educación esperanzadora de los hijos, entre sus anhelos y desvelos; en la intimidad del hogar y en el ruido ensordecedor de nuestras calles. Es allí, en medio de los caminos polvorientos de la historia, donde el Señor viene a tu encuentro”, afirmó el Arzobispo de Lima.
Asimismo, en relación al lema de la visita “Unidos por la esperanza”, recordó que el Papa dejó la tarea de cuidar la esperanza, “que no se la roben. No hay mejor manera de cuidar la esperanza que permanecer unidos”.
El Arzobispo indicó que durante su visita, el Pontífice resaltó que se necesita la unidad de la Iglesia, “esa unidad que brota de la comunión con Cristo que nos une al Padre en el Espíritu y, en la Eucaristía, nos une unos con otros en ese gran misterio que es la Iglesia”.
El Cardenal Cipriani culmina su carta pastoral agradeciendo a los fieles por su colaboración, “por sus oraciones, por su lección de fe que han dado al mundo entero”, y los encomendó a la protección de la Virgen María.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 25 de enero de 2018
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