“Después de una protesta social, se han verificado choques, que han causado también algunas víctimas”.
“Expreso mi cercanía en la oración a ese amado país, y me uno a los obispos en la petición del cese de toda violencia” para que “se evite un inútil derramamiento de sangre y las cuestiones abiertas sean resultas pacíficamente y con sentido de responsabilidad”.
La situación en Nicaragua empeora cada día. El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (independiente del Gobierno) cuenta ya 25 muertos y 64 heridos.
Los manifestantes se oponen a una reforma al Seguro Social y las protestas empezaron el miércoles 18 de abril en Managua, cuando centenares de críticos al Gobierno se juntaron en un centro comercial.
Por su parte, el Presidente del país, Daniel Ortega, ordenó el despliegue del Ejército en algunas ciudades claves del país, incluida la capital, donde militares resguardaban edificios públicos, después de que el viernes fueran incendiados estructuras oficiales en zonas del país.
Publicar un comentario