Texto y Foto: Pbro. Óscar Maldonado Villalpando
Se ha llegado el día de respaldar a mi Seminario.
Porque desde el día en que estos muchachos salieron de su casa, se hicieron de nuestra familia.
Cuando ellos escuchan el llamado y se deciden a ir en pos de Jesús, ya son de todos nosotros.
Cuando ellos eligen seguir al Señor, nos dan ejemplo de generosidad para entregarse a sí mismos.
Por eso entre todos los creyentes nos corresponde participarles nuestra ayuda.
Apoyo espiritual para que Dios fortalezca y santifique su vocación.
Contribución económica, a fin de que no carezcan de lo necesario para vivir y formarse.
Queremos a nuestro Seminario, y por eso solidariamente lo acompañamos y ostenemos.
Amamos a nuestros Seminaristas y por eso cuentan siempre con nosotros.
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