En un comunicado emitido el sábado 23 de octubre, el Obispo de Umuahia, Mons. Lucius Iwejáru Ugorji, afirmó que el regreso seguro del sacerdote fue la respuesta de Dios a “nuestras oraciones”.
“Me complace anunciar que uno de mis sacerdotes, el P. Mark Chimezie Godfrey, que fue secuestrado el 13 de octubre de 2021, ha recuperado su libertad hoy, después de diez días de cautiverio”, dijo en el comunicado obtenido por ACI África, agencia del Grupo ACI.
El obispo nigeriano agregó: “Agradecemos inmensamente a Dios por responder a nuestras oraciones y facilitar su regreso ileso”.
El P. Godfrey, joven sacerdote que fue ordenado a principios de este año, fue secuestrado después de celebrar en la mañana del miércoles 13 la Misa en la parroquia de San Gabriel, muy cerca a su casa.
En su declaración del 23 de octubre, el Obispo de Umuahia expresó su “profunda gratitud” a todos aquellos que rezaron por la liberación.
“Aprovecho esta oportunidad para expresar nuestro profundo agradecimiento a todos los obispos, sacerdotes, consagrados y consagradas y todos los fieles de Cristo que nos ayudaron con las oraciones durante el difícil y penoso período de su cautiverio. Que Dios los bendiga y recompense abundantemente por su solidaridad”, dijo.
El P. Godfrey se suma a la lista de sacerdotes secuestrados y posteriormente liberados en la nación más poblada de África, que sufre una ola de inseguridad desde 2009 con la insurgencia del grupo terrorista Boko Haram que quiere convertir el país en un Estado islámico.
El 11 de octubre, el Seminario Mayor Cristo Rey de la Diócesis de Kafanchan fue atacado y tres seminaristas fueron secuestrados. Ellos fueron liberados el 13 de octubre.
En un informe publicado el 13 de octubre, el catequista Mathias Ezenwa Uwakwe de la parroquia Santa Teresa dijo que el vehículo del P. Godfrey fue interceptado por hombres armados que lo obligaron a subirse a un jeep.
“Lo que creo es que pudo haber sido confundido con otra persona porque no sabemos por qué un sacerdote joven que acaba de comenzar el servicio de Dios debería ser secuestrado”, dijo el catequista Uwakwe.
“Los secuestradores pueden haber estado buscando a otra persona y pueden haberlo encontrado y haberlo secuestrado”, agregó.
Al conocerse el secuestro, el canciller de la Diócesis de Umuahia, P. Henry Maduka, pidió oraciones por el joven sacerdote, que se desempeñaba como asistente del párroco de la iglesia Santa Teresa.
“Por lo tanto, se nos aconseja estar tranquilos pero orar por su rápida liberación de las manos de sus secuestradores. Que la Reina y Madre del Eterno Sacerdote recen por él”, dijo en aquel momento el P. Maduka en referencia al sacerdote secuestrado.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en ACI África.
Publicar un comentario