, 02 Ene. 20 (ACI Prensa).- Con una Misa se recordó los 15 años del trágico incendio que cobró la vida de 194 personas en la discoteca República de Cromañón en Buenos Aires (Argentina).
El pasado 30 de diciembre se realizó una Eucaristía presidida por el Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Mario Poli; concelebrada por el Arzobispo de San Juan de Cuyo, Mons. Jorge Lozano; el Obispo Auxiliar de Buenos Aires, Mons. José María Baliña; y los sacerdotes P. César Femia, P. Jordi Sabaté y P. Martín Rebollo Paz.
Mons. Lozano, que desde el trágico suceso acompañó espiritualmente a familias y sobrevivientes, expresó que a los asistentes a la Misa los une “una experiencia desgarradora de dolor, aquellas horas de incertidumbre y búsquedas desesperadas. Recordamos los ninguneos y también los compromisos de personas desconocidas”.
“Nos une el dolor por las consecuencias de la corrupción y la indolencia de la burocracia”, sin embargo, “Aquí estamos de pie, dando testimonio del amor que no guarda en el olvido a los que murieron, a los que sobrevivieron, a las familias y amigos”.
“El amor nos hace decir ‘presente’ delante de la sociedad y ante Dios en este templo catedral de Buenos Aires que es su casa y la de sus hijos. Lugar de encuentro, oración, consuelo”, aseguró.
“Nos une además la indignación por la vida joven pisoteada. Por la falta del cuidado de los demás. Indignación por los sobornos, por la búsqueda de dinero sin tener en cuenta la seguridad de quienes fueron a una fiesta”, agregó.
En ese sentido, Mons. Lozano alentó a pedir para que “la vida sea valorada y protegida como se merece por la dignidad que Él nos dio”.
La tragedia de 2004El 30 de diciembre de 2004 más tres mil personas disfrutaban de una fiesta de rock. Mientras la banda Callejeros tocaba su primer tema, el público comenzó a encender bengalas como era costumbre en esos shows.
Una de esas bengalas desató un incendio en el techo que luego se propagó por el recinto generando pánico y una estampida de las personas desde un lugar que solo tenía capacidad para unas mil. En el lugar fallecieron 194 personas y otras 1400 resultaron heridas.
Durante el juicio se descubrió los sobornos que permitieron el uso inadecuado del recinto. Fueron 26 personas las juzgadas como responsables pero solo 21 fueron condenadas.
Luego de la tragedia, el Papa San Juan Pablo II envió un telegrama para expresar su "profundo pesar" por las numerosas muertes. En tanto, la madrugada del 31 de diciembre de 2004 el entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco, visitó a varios heridos en los hospitales y presidió Misas en algunas fechas de aniversario.
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