La Asamblea general de las Naciones Unidas (ONU) se reúne hoy para discutir acerca de la migración –por primera vez en su historia- con el objetivo de suscribir un acuerdo, entre los 193 países miembros, conocido como la “Declaración de Nueva York”, para delinear una “estrategia pragmática” fundada en “principios” compartidos, gracias a la cual “podrá acudirse en ayuda de los refugiados y migrantes” sin negar por ello “nuestros valores más preciosos”, según ha explicado el secretario mismo de la ONU, Ban Ki-moon.
Jefes de Estado y de gobierno se reúnen en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York para la aprobación de un documento común que sea capaz de afrontar la mayor emergencia en dicha materia desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. El objetivo es unificar la acción de los 193 países que son miembros en pos de un abordaje coordinado, que sepa tutelar los derechos humanos de refugiados y migrantes.
Para los expertos de la ONU un acuerdo podría favorecer el surgimiento de soluciones a largo plazo, así como respuestas eficaces a las emergencias en curso.
Sin embargo, no faltan los problemas y dificultades en vista de la aprobación de la “declaración” común, incluso a pesar de que la misma no tiene valor vinculante. Además, en este momento histórico la cuestión de los migrantes se ha convertido en una fuente de división entre los Estados Unidos y Europa. Activistas y ONG internacionales que defienden los derechos humanos destacan que dicha cumbre podría ser “saboteada” por naciones que actúan “en su beneficio personal”, y que se desentienden de la suerte de millones de refugiados.
Al presentar el encuentro, el secretario general de las Naciones Unidas subraya que el tema de los refugiados figura entre aquellos “que se más se prestan a las manipulaciones de los demagogos”. Ban Ki-moon denuncia asimismo la “incitación a la xenofobia” que “frecuentemente se expresa a través de la violencia”.
Un fenómeno que involucra sobre todo a los países industrializados, en tanto –como bien recuerda el jefe de la diplomacia de la ONU- “contrariamente a lo que podría pensarse, no son los países ricos aquellos en los que se concentra en mayor número de refugiados: el 86% de ellos encuentra reparo en países en vías de desarrollo”, y la ayuda brindada a estos gobiernos “está muy lejos de ser suficiente”.
Según fuentes del Alto Comisariado de la ONU para los refugiados, a fines de 2015 se alcanzó una cifra de 65,3 millones de evacuados; un número “jamás registrado antes”, con un aumento de más de cinco millones respecto al año anterior. Además, los migrantes en el mundo suman más de 224 millones.
En total, hay 21,3 millones de refugiados, 3, 2 millones de personas que solicitan asilo, además de 40,8 millones de migrantes-. Según la definición del departamento de las Naciones Unidas, los refugiados son personas que se han visto obligadas a abandonar su tierra a causa de un conflicto armado en curso, o por ser víctimas de persecuciones; por otra parte, los migrantes son personas que han decidido dejar su país adrede, en busca de una vida mejor.
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