Pasito a pasito, no deja de avanzar
Parroquia San Cristóbal
Con casi cuatro décadas, esta comunidad evoluciona, se renueva y no deja de crecer como un ente vivo que busca florecer. Sus sacerdotes la definen como la parroquia
que ama a su parroquia.
Sonia Gabriela Ceja Ramírez
La comunidad de San Cristóbal Mártir, en la Col. SUTAJ, se erigió oficialmente el 4 de noviembre de 1978, por lo que el año que entra estará cumpliendo, 40 años como parroquia.
“Esta comunidad pertenecía a la parroquia de San José y Santo Tomás, que es vecina, pero previamente, cuando empezó a formarse, era atendida por padres que venían de la parroquia de San Pedro, Tlaquepaque, que también es cercana”, explica el señor Cura Javier González Ramírez.
La población es de aproximadamente 6,500 personas y han pasado por la comunidad cinco párrocos y 12 vicarios parroquiales, así como un sacerdote adscrito.
De un corral, a una sólida parroquia
“Hace más de 40 años aquí solamente había un centro de catequesis al que le llamaban el corralito y donde después comenzó a celebrarse la Misa. Una vez creada la parroquia, poco a poco comenzó a construirse el templo”.
La señora Martha Cisneros González, actual encargada del equipo de Liturgia, refiere que recuerda que cuando ella llegó a la parroquia, había solamente un terreno, un corralón con techo de lámina y como bancas utilizaban vigas sentadas en ladrillos, los asientos de camiones que donaban los choferes del transporte público pues el fraccionamiento surgió para ellos, o la sillita que cada quien traía para participar en la misa.
“La gente colaboró económica e incluso físicamente para limpiar el terreno donado porque era un terreno baldío lleno de maleza y así poco a poco logró levantarse el bonito templo que tenemos ahora”.
Una población que envejece
El señor Cura explicó que, como en toda la zona, en la parroquia la población predominante es de adultos y adultos mayores. “Hay semanas en que tenemos más Misas exequiales que Bautismos de niños. Ese es un dato significativo”.
Territorialmente, la parroquia está dividida en cuatro zonas pastorales que llevan el nombre de cada uno de los evangelistas.
“En el aspecto profético, en catequesis, hay tres centros de catecismo, siendo el de la parroquia el más numeroso”.
Hay también ocho centros de evangelización, cuyo encargado es el Padre Fernando Aguilera González, vicario parroquial, quien dijo que en estos centros las personas se reúnen con dos fines: “escuchar temas, relacionados al momento específico que se está viviendo. Por ejemplo, en el Año de la Misericordia se explicaron cada una de las Obras de Misericordia. Actualmente se imparten temas bíblicos y algunos otros de interés actual, sobre todo encaminados a resolver dudas sobre nuestra fe.
“Generalmente comenzamos con el rezo del rosario y luego se explica el tema.
“También en los centros, ocasionalmente hacemos confesiones y exposición del Santísimo, y de vez en cuando celebramos la Misa, sobre todo en diciembre durante el docenario de la Virgen de Guadalupe”.
Gente colaboradora y participativa
El señor cura refirió que en los centros de catequesis se atiende a un promedio de 250 niños. “También hay un grupo de adolescentes que se atiende el sábado por la mañana.
“El grupo de jóvenes ha pasado por varias etapas. Actualmente, este grupo juvenil se está reorganizando.
“De las catequesis presacramentales sobresale la Confirmación. El sábado 22 tuvimos Confirmaciones y recibieron el sacramento 159 muchachos. Cuando yo llegué aquí hace 7 años el promedio era de 70 confirmaciones, hoy, por cuarto año consecutivo se han rebasado las 150 confirmaciones.
“En cuanto a lo social, se reparten 75 despensas por parte de Cáritas parroquial entre personas de aquí mismo de la comunidad. Además, damos atención a los enfermos visitándolos y confesándolos”.
En cuanto a lo litúrgico, explicó la Sra. Marta Cisneros, “el grupo está formado por 11 compañeros que estamos distribuidos en las seis misas dominicales, vamos rotando turnos y apoyamos a los sacerdotes mediante las moniciones también en las ceremonias especiales. Todos los compañeros tienen gran disposición y son muy participativos, en otras actividades como las procesiones y todo lo que se refiere a la liturgia.
“Asistimos también a la escuela de agentes de pastoral para dar un mejor servicio a nuestra parroquia”.
La formación ante todo
Y es que el párroco apuesta a la formación de agentes laicos. “Cuando llegué a esta parroquia se inició la escuela de formación de agentes a nivel decanato, y en los primeros 2 o 3 años, el 90 por ciento del equipo coordinador básico participó en la formación. Yo les digo a ellos que yo estoy convencido de que la mejor inversión pastoral de una parroquia es formar a los agentes de pastoral. Para mí eso es muy importante”.
En cuanto a grupos, la parroquia cuenta con Adoración Nocturna y Renovación Carismática. Además se tiene un coro de la parroquia y dos más que asisten de otras parroquias.
Prioridades
El primer plan pastoral de la parroquia se elaboró en 2014 y se planteó para 3 años. Actualmente se elabora el segundo plan que estará vigente de 2018 a 2020.
“Hemos estado trabajando algunas prioridades como la educación en valores humanos, sociales, religiosos y éticos. Esto lo trabajamos en nuestros grupos.
“La segunda prioridad es la familia. En su momento tuvimos una escuela para padres de familia que duró 2 años en dos etapas. En la primera, nos reuníamos cada 15 días y en la segunda etapa la reunión era mensual.
“La tercera prioridad son los jóvenes. Actualmente es muy difícil atraerlos pero eso para la parroquia tiene que ser una prioridad permanente. Debemos seguirlos motivando y atrayendo”.
Una fiesta grande, para un santo grande
Respecto a las fiestas patronales el señor Cura explicó que cada día se le encomienda a una zona pastoral y también a uno de los grupos parroquiales, por ejemplo, un día le toca a liturgia, otro día a catequesis.
“Todo empieza desde las 7.30 de la mañana en que se invita a la gente para el rezo del Santo Rosario y de la novena a San Cristóbal. La Misa solemne es a las 7 de la tarde. Generalmente se invita a los sacerdotes que estuvieron aquí o que son sacerdotes que salieron de esta comunidad.
“Al grupo que le toca cada día, libremente invita al sacerdote que quiere. Después de la celebración de la Misa se tiene una cena del grupo que organiza, el sacerdote invitado y los padres de la comunidad. Es un momento de convivencia y acercamiento que a mí me gusta mucho”, refiere el sacerdote.
“Este año por primera vez, han venido en peregrinación los centros de evangelización con la imagen de San Cristóbal.
Ilustres visitas
“Además, pasando las fiestas, nos visita la imagen del Señor del Encino, originaria de Yahualica”, de donde también es el señor Cura.
“Luego viene la visita de la Virgen de Zapopan, que prácticamente es también una prolongación de nuestras fiestas patronales”.
“Desde hace cuatro años, con motivo del aniversario parroquial, el 4 de noviembre, nos visita la imagen de Nuestra Señora de Santa Anita. Para estas visitas, de hace un recorrido por las calles que son adornadas para recibir a estas imágenes.
“Nuestra Señora de Santa Anita es abogada de los enfermos por lo que procuramos que los enfermos se junten en algún sitio y se les lleva la imagen que pueden además tocar. Incluso hemos tenido oportunidad de que visite la casa de alguno de ellos durante su recorrido.
Un buen patrono
San Cristóbal es patrono de los choferes, los conductores, de los que van de camino. También lo han invocado como patrono en las tempestades y en su comunidad le tienen mucha devoción.
“Cuando surgió esta colonia SUTAJ (Sindicato Único De Trabajadores Automovilistas de Jalisco) estaba destinada a los choferes y desde que surgió la parroquia siempre se pensó que estaría dedicada a San Cristóbal.
La señora Martha Cisneros asegura que un factor determinante han sido los buenos sacerdotes que han estado presentes en la comunidad y la mantienen viva y creciendo.
Por su parte el vicario parroquial dijo que la gente de San Cristóbal ama a su parroquia, se pone la camiseta y esta al pie del cañón para ayudar a toda la comunidad: enfermos, gente de los demás grupos o a sus sacerdotes.
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