Apoyos valiosísimos
Moisés Mercado Alonso, 3º de Teología
Un poco de Historia. La Adoración Nocturna, fundada el 28 de enero de 1900 en el Templo de San Felipe de Jesús, de la Ciudad de México, fue abrazada luego en el Seminario Diocesano de Guadalajara para motivar en sus alumnos el hacer guardia y oración en horas de la noche a Cristo en la Sagrada Eucaristía.
La Vigilia de Espigas.
Al momento de Adoración que hacen los adoradores nocturnos, con su Ritual como guía, se le llama “Vigilia”. Hay varias Vigilias señaladas dentro del Año Litúrgico, y una de ellas es la de Espigas, la cual tiene la connotación de dar gracias a Dios por todos los beneficios recibidos. Esto se remonta al tiempo de la cosecha del grano. Por ello, para septiembre, muchas parroquias la realizan, tiempo de agradecer a la Providencia por los beneficios otorgados. En el Seminario se agradece por los frutos vocacionales para la Iglesia de Guadalajara.
El reciente viernes 19 de febrero, el Seminario Mayor fue visitado por más de un millar de adoradores provenientes de toda la Arquidiócesis y por 161 banderas blancas que hicieron más vistoso el momento eucarístico. El Seminarista se llena de gozo y esperanza al saber que el Pueblo Santo de Dios sigue pidiendo por él y es esperado en las Parroquias, en un futuro próximo, para ejercer su ministerio pastoral.
Una adoradora da su testimonio.
“Yo soy la señora Teresita Rendón Ramírez, originaria de la parroquia de San Francisco, en Tesistán; pero actualmente pertenezco a la Parroquia de Santa Lucía. Tengo 44 años de adoradora, y 15 años asistiendo a la Vigilia de Espigas al Seminario. Vengo porque me llena mucho; me encanta ver ahí a todas las personas, a los Seminaristas, a los Sacerdotes trabajando para darnos la Salvación. Se están preparando ellos (los Seminaristas) para darnos el boleto a la Salvación, cuando estemos en agonía. Esta Vigilia tiene de especial que es una preparación en la que uno se siente lleno de Dios. Viene uno muy contento y se regresa más contento de ver aquella entrega de los Sacerdotes y Seminaristas en la Adoración Nocturna. Estamos muy acostumbrados los adoradores a pedir siempre por nuestros Sacerdotes y por las vocaciones sacerdotales. Me motiva mucho el ver todo el montón de Seminaristas vestidos de blanco (revestidos con sotana y cota); y yo, dentro de mí, digo: métanle ganas para llegar a lo que ustedes quieren llegar, al sacerdocio. Hay que pedir por los Seminaristas.
El día de la gratitud.
Además, el domingo 21 de febrero correspondió, a la Casa del Seminario Menor, recibir a cerca de 4 mil Bienhechores para la tradicional Convivencia. Este día se prepara con mucho entusiasmo para agradecer y festejar a esta parte muy importante de la gran Familia que es el Seminario.
Los Bienhechores se reunieron a las 11 de la mañana en torno a la Eucaristía. Luego de la Misa, siguió la comida, que con mucha alegría y gratitud los Seminaristas de los Terceros, es decir, Tercero de Preparatoria, Tercero de Filosofía y Tercero de Teología, así como los Diáconos, sirvieron en la explanada del Seminario Menor. Esta gran fiesta se complementó con la música del Mariachi San José, del Seminario tanto Mayor como Menor, así como con juegos y ocurrencias de los Seminaristas y sus Bienhechores.
Agradecemos de corazón a las personas que sabemos que, con esfuerzo y mucha Fe, se quitan el alimento de la boca para compartirlo con nosotros, sus Seminaristas. Agradecemos también por la oración que siempre hacen por las vocaciones y los Sacerdotes. Les damos gracias por hacernos el bien, y sepan que nosotros también los queremos mucho.
El próximo 6 de marzo es Día del Seminario: “Roguemos al Dueño de la Mies que siga enviando trabajadores a su campo”, pues ¡Vale la pena ser Sacerdote!
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