Al Cubilete

Peregrinación de la Arquidiócesis al Cubilete

Que Cristo Rey sea honrado por todos

Pbro. Juan Javier Padilla Cervantes

El próximo lunes 18 de noviembre, la Arquidiócesis de Guadalajara peregrinará al Monumento Nacional de Cristo Rey, en el Cerro del Cubilete, de Silao, Guanajuato, bajo el Lema: “En marcha, con Fe, hacia la Nueva Evangelización”.

La Fiesta de Cristo Rey tiene una historia interesante

La Biblia presenta a Jesús claramente como Rey, pero fue hasta 1925 cuando la Iglesia estableció una Fiesta con ese Título. El Papa Pío XI, con su Encíclica “Quas Primas”, fue quien inauguró esta celebración como respuesta a los regímenes totalitarios de aquellos tiempos, los cuales reclamaban un poder absoluto sobre sus ciudadanos y se burlaban del papel de Dios en guiar al pueblo creyente. En el caso de México, recordamos, por ejemplo, al Gobierno de Plutarco Elías Calles, quien persiguió a Obispos, Sacerdotes y Laicos Católicos, desatando la guerra llamada Cristiada.

El Papa Pío XI manifestó a los Obispos mexicanos que la devoción de Cristo Rey en México lo motivó a instituir la festividad para toda la Iglesia Católica, pues México fue la primera Nación en consagrarse como vasalla de Cristo Rey en 1914, edificando, por tal razón, el Primer Monumento Nacional a Cristo Rey, en 1920. La Encíclica Pontificia vio la luz el 11 diciembre de 1925.

Gestación y desarrollo

A partir de 1920, se construyeron 5 Monumentos a Cristo Rey, reconocidos como Votivos Nacionales; cuatro de ellos sobre la Montaña del Antiguo Cubilete, y uno en la Iglesia Catedral Basílica de León, Guanajuato:

Primer Monumento. Fue erigido por Monseñor Emeterio Valverde y Téllez, Obispo de León, en la cumbre del Cubilete, en 1920, mismo que fue dinamitado por enemigos de la Iglesia en 1928.

Segundo Monumento. Éste no se llegó a construir y quedó sólo en una primera piedra, que se colocó el 11 de enero de 1923, bendecida por el entonces Delegado Apostólico en México, el Arzobispo Ernesto Filippi, quien fue desterrado por el Gobierno Federal por dicho acto, juzgado como anticonstitucional.

Tercer Monumento. Es la Capilla Monumental de Cristo Rey, edificada en 1937 por el Obispo Valverde en la Catedral Basílica de León, Guanajuato, y que fue bendecida el 11 de enero de 1938, la cual es considerada como Monumento Nacional.

Cuarto Monumento. Predecesor del actual, fue construido por el Presbítero José Ascensión Betancourt y Montes de Oca en la cumbre de la referida montaña, en abril de 1942, pero luego fue regalado a San Luis de la Paz, Guanajuato, donde actualmente se encuentra.

Quinto Monumento. El actual Monumento Votivo Nacional, levantado sobre la cima del Monte Santo de Cristo Rey, a partir del 11 de diciembre de 1944, fecha en que se colocó y bendijo su primera piedra por el mencionado Prelado Emeterio Valverde.

El Cardenal Garibi Rivera y el Monumento a Cristo Rey
El 23 de junio de 1943, el sexto Arzobispo de Guadalajara, José Garibi Rivera, y Monseñor Villanueva se entrevistaron en México con el Presidente de la República, General Manuel Ávila Camacho, exhortándolo a que concediera su autorización para que se llevara a cabo la proyectada obra. El Primer Mandatario accedió diciendo: “Con gusto doy el permiso que ahora me piden para que se emprenda esa obra, que hace varios años debió llevarse a cabo y que no se hizo por esas lamentables discordias nuestras”. A partir de este momento, Monseñor Garibi Rivera comenzó a promover una Colecta anual en todas las Parroquias de la Arquidiócesis tapatía en favor de la construcción del Monumento a Cristo Rey.

62 años peregrinando

Concluido e inaugurado el Monumento actual a Cristo Rey, el propio Prelado Metropolitano motivó a toda su feligresía para que realizara una Peregrinación a la Montaña de Cristo Rey: “Felizmente está ya instalada la imagen de Cristo Rey en la Montaña del Cubilete. Corresponderá a la Provincia Eclesiástica de Guadalajara hacer esta Peregrinación el día 21 de mayo próximo”, termina señalando la Carta Circular, fechada el 21 de marzo de 1951, encomendando la organización de dicha Peregrinación al señor Cura Rafael Meza Ledesma, Párroco de San Felipe de Jesús, quien por muchos años más se encargó de convocar, animar y coordinar grandes caravanas de fieles.

Incluso, en 1972, al cumplirse 400 Años del Natalicio de San Felipe de Jesús; 375 Años de su Martirio, y 110 de su Canonización, Monseñor Meza Ledesma organizó una Gran Procesión Nacional de la ACJM (Asociación Católica de la Juventud Mexicana) para llevar y depositar, en una Capilla interior del Santuario de Cristo Rey, una imagen del Protomártir y Primer Santo Mexicano, Segundo Patrono Nacional y Modelo de la Juventud. La previa Celebración Eucarística la presidió Mons. Francisco Javier Nuño Guerrero, Arzobispo-Obispo de San Juan de los Lagos, Diócesis recién erigida.