Signos de los Tiempos
Por Jorge Rocha
Cuando este texto este publicado, el periodo que tenían los diputados locales para hacer la reforma política estatal para entrar en vigor en las próximas elecciones, estará agotado. Desde mi punto de vista el proceso adoleció de cuatro asuntos que tuvieron que estar presentes y que los representantes de los jaliscienses no quisieron o no pudieron tomar en cuenta.
El primer error es el momento en el que se realizó el debate y las negociaciones. Como coloquialmente se dice, hicieron esta reforma sobre las rodillas, con el tiempo encima, con un límite demasiado estrecho para poder negociar una reforma que efectivamente resolviera los temas nodales del sistema político-electoral local. El apresuramiento es la mejor forma de entrampar acuerdos o colocar reformas mal intencionadas o con poca capacidad de incidencia y de transformación real. En este tipo de agendas las “prisas” nunca son buenas consejeras y el riesgo de hacer reformas cosméticas es demasiado alto.
El segundo error fundamental es que los diputados y diputadas que ahora discuten la reforma político-electoral tienen un serio problema de conflicto de interés porque es posible que varios de ellos busquen competir en las próximas elecciones, es decir, pretenden construir las reglas de un juego en el que varios de ellos estarán implicados. Esta situación provoca que el incentivo de hacer normativas que los favorezca directamente a ellos es muy alto y por lo tanto pueden aparecer reformas ad hoc para favorecer o entorpecer a actores políticos concretos y específicos.
El tercer problema de la forma como se discutió esta reforma está en la no implicación de otros actores sociales como organizaciones de la sociedad civil o académicos. El debate se constriñó a la participación de la clase política; y las voces ciudadanas o de expertos sólo pudieron expresar sus críticas y propuestas desde los medios de comunicación masiva. Al no incorporar a las propuestas, los diagnósticos y las perspectivas de otros actores sociales y políticos, deriva el riesgo de generar reformas auto-referentes y endogámicas que sólo atienden a las necesidades de la clase política local. La validación social y ciudadana en un ejercicio de esta naturaleza es fundamental y prioritario para su legitimación social y política.
La cuarta deficiencia del proceso para discutir y aprobar la reforma político-electoral en Jalisco es la incapacidad de hacer planteamientos integrales que atiendan a la lógica sistémica. Desde hace años hemos comprobado que buenas iniciativas que no van acompañadas de cambios más amplios terminan siendo poco efectivas y no resuelven los problemas de fondo. Desde las universidades y grupos interesados en estos temas hay suficiente evidencia de que los problemas de la vida político-electoral en Jalisco radican en que tenemos un sistema poco funcional desde varios de sus componentes. Ante un sistema que no funciona es ingenuo pensar que una sola reforma puede cambiar todos los problemas. A sistemas descompuestos no se les puede resolver con soluciones aisladas, por más potentes que estas sean. Lo que vimos en los diferentes actores políticos fue un listado de reformas aisladas y varias de ellas sin ningún tipo de sustento y reflexión, que por supuesto, pueden generar un bodrio sin sentido y contradictorio.
Los cuatro asuntos que he planteado me lleva a pensar que la forma de resolver este problema de la manera más adecuada, es que las distintas fracciones políticas lleguen a un acuerdo de que la primera acción de la nueva legislatura que entre en funciones en el segundo semestre de 2018, sea precisamente la discusión y el debate para ahora sí, llegar a una reforma política de amplio calado, donde efectivamente resolvamos los problemas de representación, el financiamiento a partidos, el modelo de comunicación política, la función de los regidores y la relación de todos estos asuntos con las recientes reformas de los mecanismos de participación social. Es posible que el proceso sea largo y tortuoso, pero en esta materia más vale caminar despacio que llegar a apresuramientos que sólo nos llevan a soluciones insuficientes e intermedias.
Correo electrónico:
jerqmex@hotmail.com

Publicar un comentario