La proposición de ley iba a ser votada este miércoles en el Congreso de Diputados pero un error burocrático de Podemos ha obligado a aplazar el trámite
Vulnera derechos y recorta libertades
En la práctica, la propuesta de Podemos, de ser aprobada, implicaría que los niños de Primaria tendrán que estudiar y ser examinados de ‘diversidad sexual’ y los medios de comunicación estarán obligados a incluir en su programación, para todas las franjas de edad, “la diversidad por orientación sexual, identidad y expresión de género”. Además, la ‘ley mordaza LGTBI’ prohíbe expresamente que las personas puedan recibir asesoramiento para revertir su orientación sexual o su identidad de género y crea un nuevo organismo, la Agencia Estatal contra la discriminación por orientación sexual, identidad de género, expresión de género y características sexuales, encargada de dictaminar quién incita a la discriminación y debe ser castigado por ello con multas, suspensión de actividad (en el caso de los profesionales) y cierre de locales. La Proposición de Ley contra la discriminación por orientación sexual, identidad o expresión de género y características sexuales, y de igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transgénero e intersexuales iba a ser votada este miércoles en el Congreso de Diputados pero un error burocrático de Podemos ha obligado a aplazar el trámite. “Si se aprueba el texto”, concluye Arsuaga, “podrán despedir a los profesores que se opongan al adoctrinamiento de género en las aulas. Podrán multar a los médicos y personal sanitario, podrán sancionar a jueces, o cerrar medios de comunicación.Y desde luego podrán cerrar HazteOir.org y también prohibir y literalmente destruir el #HOBus. Es la libertad de todos la que está en juego”.Los cinco puntos más flagrantes de la ley
- Obliga a adoctrinar a los niños y jóvenes en ideología de género invitándoles a cuestionar su identidad sexual desde pequeños.
- Permite que los menores decidan, al margen de los padres, acceder a la reasignación sexual quirúrgica así como a bloqueadores y tratamientos hormonales.
- Establece multas de 45.000 euros para los que discrepen y el secuestro y destrucción de libros que no se ajusten a las exigencias de los colectivos LGTBI.
- Prohíbe expresamente que las personas puedan recibir asesoramiento para revertir su orientación sexual.
- Obliga a numerosos colectivos (educadores, profesionales de los medios de comunicación, médicos, psicólogos…) a acatar los postulados de la ley por encima de las libertades de enseñanza y expresión, la ciencia o la demanda de ayuda por parte de las personas.
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