Mamá!… Papá!
Alfredo Magaña Cárdenas
Hace poco, relativamente, perdí a mis papás y el vacío que me dejaron lo lleno todos los días y a cada momento con los recuerdos de los momentos que pasamos juntos.
Yo soy el mayor de once hermanos, Dios me ha permitido vivir y convivir con todos desde que nacieron.
No sé por qué pero siempre fui muy apegado a mi mamá y un poco menos a mí papá, pero esos momentos juntos, en cualquier circunstancia formaron un “edificio” familiar no solo indestructible sino único, blindado contra todo, sentado en un cariño que tratamos, al menos yo, de vivirlo cada vez que nos veíamos en el día; y nos veíamos diariamente así.
En lo personal me tocó ser testigo de la vida sin televisión, sin radio y con el disfrute de ver el cielo, las estrellas, los árboles y todo lo que nos rodeaba. Platicar, desayunar, comer, merendar, todo un ritual presidido por mi papá cuyo gusto por lo que ahí disfrutaba nos lo transmitía por su singular forma de hacer un “escándalo” por lo sabroso que mi mamá cocinaba. El crecer así, era natural para nosotros porque éramos una familia. Quizá como todos los demás que nos rodeaban.
En la actualidad les invito a vivir un día sin radio, sin televisión, sin internet; únicamente conviviendo con su familia, platicando de lo que quieran, será una experiencia muy especial estoy seguro.
Pregunten a sus papás por sus abuelos, bisabuelos, tatarabuelos; descubran sus orígenes, conozcan sus raíces, quieran a su familia, disfruten a su familia; el amor familiar es único, háganselo conocer a sus padres, ellos viven de su amor, dénselo, no les cuesta nada, es natural para ustedes, pero para ellos siempre será algo especial, solo véanlo en sus ojos.
Pidamos al Señor nos ilumine para poder influir en quien pueda influir para hacer de nuestras familias, nuestra ciudad, estado y país un bastión de la verdad…La verdad nos da confianza.
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