“Con profundo dolor por lo ocurrido y en contra de la violencia sin sentido hacia las víctimas inocentes en Daca, el Santo Padre Papa Francisco expresa su más sentido pésame y condena tales actos bárbaros que ofenden a Dios y a la humanidad”.
El mensaje, también asegura que Francisco “encomienda a los fallecidos a la misericordia de Dios y asegura sus oraciones para sus familias y los heridos".
De momento, 26 personas han muerto y otras muchas están heridas después de que varios hombres musulmanes entrasen armados en el restaurante Holey Artisan Bakery-O'Kitchen, especializado en cocina mediterránea, y situado en un barrio diplomático.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 21 horas locales cuando una decena de atacantes irrumpió al grito de “Allahu Akbar” (Alá es grande) en el restaurante, frecuentado por diplomáticos y hombres de negocios extranjeros residentes en el país.
El asalto comenzó cuando muchos de los clientes se dirigían al restaurante para romper el ayuno durante el Ramadán.
Según el periódico “Daily Star”, los terroristas torturaron durante el asalto a cualquiera que fuera incapaz de recitar el Corán. Además, los asaltantes proporcionaron comida sólo a los rehenes bengladesíes.
Los yihadistas tomaron 13 rehenes, la mayoría ellos extranjeros, a los que mantuvieron cautivos durante toda la noche hasta que la policía logro acceder al establecimiento y acabar con la vida de seis terroristas.
La mayoría de extranjeros que se encontraban en el restaurante son italianos y entre los liberados también hay diez bengladesíes y tres extranjeros, un japonés y dos ciudadanos de SRI Lanka.
La policía habría conseguido detener a uno de los atacantes y otro habría conseguido escapar. La toma del restaurante fue reivindicada horas más tarde por el DAESH o autodenominado Estado Islámico.
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— ACI Prensa (@aciprensa) 1 de julio de 2016
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