El más reciente ejemplar del Boletín Eclesiástico de la Arquidiócesis de Guadalajara, correspondiente al mes de julio, da a la luz un grabado hasta hoy no conocido del genial artista José Guadalupe Posada Aguilar (1852-1913). Se trata del retrato mortuorio de “La muy Reverenda Madre Sor María de Jesús Sacramentado, fundadora de la Hora Santa”, de 9 por 14.5 centímetros, que ilustra el libro Breve compendio de la vida de la muy reverenda madre sor María de Jesús Sacramentado, religiosa capuchina de Nuestra Madre Santísima de Guadalupe y Madre Santa Coleta, publicado en la Ciudad de México, en la Imprenta de Manero y Nava, en 1893.
La religiosa en cuestión, murió en 1886, a la edad de 68 años y 48 de religiosa, con gran fama de santidad. En el siglo llevó el nombre de Rosa Castillejos. Profesó como Monja Capuchina del Monasterio de Guadalupe en el Tepeyac, e introdujo en México un acto de Adoración Eucarística que sigue gozando de cabal salud, la Hora Santa.
El grabado representa a la Religiosa muerta, engastado su retrato en un óvalo, en cuyos extremos pueden leerse: “Sal de esta cárcel, Lirio de los valles, / enjuga el llanto del que fiel te adora, / la ingratitud que sufres me devora / y el aire pueblo de suspiros y ayes”. Corona la escena un tabernáculo que aloja una píxide cubierta con un conopeo, flanqueada por seis querubines adoradores.
Aunque la producción de imágenes y estampas religiosas de Posada ocupe un lugar destacado en el conjunto de su obra, esta se ha estudiado poco. Posada aprendió litografía con J. Trinidad Pedroza, especializándose en el dibujo y la copia de imágenes religiosas. Casado en 1875, sobrevivió a su cónyuge, que no le dio hijos.
En 1888 se trasladó a la Ciudad de México, donde murió tan pobre como vino al mundo. Su influencia ha sido muy grande en artistas posteriores a él tales como José Clemente Orozco, Diego Rivera, Francisco Díaz de León y Leopoldo Méndez.
Publicar un comentario