Según un comunicado de la Sala de Prensa del Vaticano, el mandatario albanés se reunió también en el Vaticano con el Secretario de Estado de la Santa Sede, Cardenal Pietro Parolin, y con el Secretario para las Relaciones con los Estados, Mons. Paul Gallagher.
En el transcurso de las conversaciones, según el comunicado de la Sala de Prensa, “se ha puesto de relieve las buenas relaciones existentes entre la Santa Sede y Albania y se han afrontado algunos temas de interés común sobre las relaciones entre la comunidad eclesial y la civil, la contribución de la Iglesia al bien común de la sociedad albanesa, las migraciones y la paz”.
En concreto, en las conversaciones se ha dado una especial relevancia a cuestiones regionales, como “la situación en los Balcanes occidentales y el camino de Albania, y otros países, hacia la integración plena en la Unión Europea”.
Además, en el transcurso de una audiencia en el Vaticano, el Papa reveló que durante el encuentro con el Primer Ministro, el mandatario albanés le explicó que “la primera Constitución en Albania establecía que a quien llamara a la puerta debías abrir, porque era Dios”.
El Pontífice explicó que de esa cultura “procede la humanidad que tienen los albaneses al recibir a los migrantes. Este pensamiento me ha tocado: quien llama a tu puerta es Dios. Ábrele y déjale tu sitio”.
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