A 29 años de su partida los pobladores de La Victoria lo siguen recordando, pero este año esta conmemoración fue especial: “Es el primer año sin la presencia de nuestro querido padre Pierre Dubois, que al igual que André vino de tierras lejanas a servir a nuestra población” expresaba la animadora de la eucaristía con la que se recordó a Jarlán, efectuada la noche del miércoles 4 de septiembre.
La misa fue presidida por uno de los grandes amigos de Pierre, Sergio Torres, quien expresó que el ejemplo de estos sacerdotes franceses demuestra que se puede ser pobre y buscar la felicidad: “Felices los pobres, porque de ellos es el Reino de los Cielos, ¿Señor por qué tus palabras no se han cumplido? Pareciera que los pobres siguen sufriendo y los ricos pasándolo bien. Sin embargo Cristo crucificado nos demuestra que es posible esta frase. Fue derrotado, pero resucitó. Pierre y André también, son un testimonio vivo de la opción de la Iglesia por los marginados, pero ellos eran subversivos luchaban contra la pobreza, no se conformaban”.
Agregó también en su homilía que “Dios no se olvida de su pueblo” y que la elección del Papa Francisco es una esperanza, un movimiento nuevo, donde “la felicidad de los pobres se hará realidad”.
Jarlan y Dubois, presentes. Ahora y siempre
Al finalizar la eucaristía los pobladores encendieron velas. No sólo para recordar el asesinato de Jarlan, sino para traer a la memoria también a su querido Pierre, quien los acompañó en momentos muy difíciles.
Una cruz de madera, fabricada con los tablas de la cama de André, presidió la procesión que se inició en la parroquia Nuestra Señora de La Victoria, terminando en la casa en que murió Jarlan.
Las casas, por donde pasó la columna de pobladores, tenían encendida velas y algunos pusieron coronas de flores para recordar a todas las personas caídas durante el Gobierno Militar.
Lina Briso, secretaria de la parroquia, recuerda que el asesinato de este sacerdote francés fue muy inesperado y que representa a todos sus familiares que murieron durante ese período. Por eso luego de 29 años siguen conmemorando con la misma fuerza cada cuatro de septiembre: “El era como el hermano menor de Pierre. Nos dijo cuando llegó que no venia a enseñarnos, que quería aprender de nosotros. Lo recordamos porque es un mártir, un poblador más que nos conquistó con su humildad y sencillez”.
La jornada concluyó con una velatón frente a la casa donde murió André y con la invitación al primer aniversario de la pascua de Pierre Dubois, el sábado 28 de septiembre a las 20:00 hrs. en la parroquia Nuestra Señora de La Victoria.
Fuente:Comunicaciones Iglesia de Santiago
www.iglesiadesantiago.cl

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