Mirando a los más necesitados

Galilea 2000, A.C., afirma:

Los malos hábitos perjudican la salud… sobre todo a los más pobres


La enfermedad, además del factor genético, es la consecuencia de un desequilibrio provocado por la manera en que vivimos, sentimos, pensamos y nos alimentamos.


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Mónica Livier Alcalá Gómez


El estilo de vida, la alimentación y otros factores influyen directamente en la salud personal: “No te da cáncer o diabetes por casualidad, como si fuera una ruleta rusa; la mayoría de las personas estamos expuestas a contaminantes del medio ambiente y a otro tipo de factores desencadenantes, como el tipo de construcción de nuestra vivienda, alimentos, productos de limpieza para el hogar y para el aseo personal, falta de ejercicio, condiciones como la obesidad y el vivir bajo intenso estrés o presión”, comentó para Semanario, Montserrat Casillas, Directora de Proyectos de Galilea 2000, Grupo dedicado a la promoción de los enfermos en situación de desamparo.

Además, aseguró que, como en México tenemos poca cultura de la prevención, es por ello que hasta que la persona se siente verdaderamente mal, decide hacerse revisiones y chequeos médicos, cuando la Medicina Preventiva podría evitar el agravamiento extremo: “Todas las personas deberíamos al menos tener un chequeo anual para verificar nuestro estado de salud, como por ejemplo el índice glucémico, la mamografía, el Papanicolau, etc.”


Los problemas de salud golpean a los más desfavorecidos

“El cáncer y la diabetes -graves problemas de salud pública en nuestro país- no respetan sexo, edad ni condición económica, pero ocurren con más frecuencia entre la población de escasos recursos o entre quienes viven en extrema pobreza”, aseveró la entrevistada.

Se debe, principalmente, a dos causas: una, que los pobres constituyen básicamente la mitad de la población en México y, por otra parte, que casi siempre éstos tienen malos hábitos alimenticios: “Por lo general, ingieren alimentos de muy bajo contenido nutrimental, y no por gusto, sino debido a su escaso presupuesto”.

Por si esto fuera poco, las condiciones medioambientales les pegan de frente, ya que por vivir en las periferias están más expuestos al humo de las fábricas y zonas industriales donde los niveles de contaminación son más altos, a lo cual se suma, muchas veces, la ignorancia y la vergüenza: “Los más desfavorecidos suelen vivir cerca de los tiraderos de basura, en donde frecuentemente se realizan quemas. Por falta de información y de presupuesto, no se practican chequeos anuales, y cuando acuden al Médico es porque la enfermedad ya se encuentra en estado muy avanzado, que es lo que sucede por ejemplo con el cáncer de mama, el cual es curable si se detecta a tiempo; mas, por desgracia, vemos con mucha frecuencia que, por pudor o por falta de información, muchas mujeres que pertenecen a las clases más desfavorecidas llegan a Galilea 2000 con cánceres ya muy avanzados, y ya nada hay qué hacer. Y es que, cuando sintieron los primeros síntomas, por ejemplo en sus senos o en su aparato reproductivo, les dio vergüenza ir al Médico”.


El cáncer y la diabetes,

problemas de salud pública
En nuestro país estos dos padecimientos ya se consideran males públicos… Ambos pueden prevenirse: “Los dos son consecuencia de la genética (se hereda la predisposición); pero, en gran medida, también son debidos al estilo de vida y a la alimentación. La diabetes mellitus es la causa número uno de muerte en México, mientras que los diversos tipos de cáncer, según datos proporcionados por el INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), son la tercera causa de muerte en Jalisco”.

Predomina, en hombres, el cáncer de próstata, y en la mujer, el de mama. Superado sólo por el Distrito Federal, Jalisco ocupa el segundo lugar en incidencia de muerte causada por cáncer de mama.

“Realmente es muy triste que ocupemos los primeros lugares en el mundo en cuanto a población obesa y/o con sobrepeso. Esto se ha convertido en el principal problema de salud pública en la República. La mala alimentación, el sedentarismo, la falta de acceso a alimentos nutritivos, son factores determinantes para la obesidad, y ésta coincide directamente en las causales de cáncer y diabetes”, refirió la Especialista.


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Una respuesta concreta para los más necesitados
Galilea 2000, A.C., es una Institución que aporta apoyo humanitario a los enfermos que vienen de rancherías, poblados o de ciudades, incluso de Estados circunvecinos, a buscar ayuda al Hospital Civil de Guadalajara. Los beneficiarios de Galilea 2000 pertenecen a uno de los sectores más vulnerables de nuestra Sociedad, ya que, aparte de padecer la pobreza, han perdido su salud.

La gente llega en una situación de grave enfermedad a una ciudad extraña, lejos de su hogar y de su gente. No tiene un lugar dónde albergarse y carece de medios económicos para rentar un espacio para permanecer mientras recibe su tratamiento médico o el de su familiar. No tiene dónde dormir, por lo que lo hace en el piso del Hospital Civil, con riesgo de contraer alguna enfermedad infecto-contagiosa, o en su defecto, en las bancas del parque conocido como Jardín Botánico”.

Estas personas, además, no tienen dónde asearse ni dónde satisfacer sus necesidades fisiológicas, por lo que optan por utilizar, para tal fin, la vía pública, causando un grave problema de higiene y salubridad.

“Su dignidad se ve afectada, provocándoles una sensación de desvaloración como seres humanos, y creándoles trastornos psicológicos que afectan su actuación y se traducen en desequilibrio y desorden emocional”.

Al notar esta situación, la señora María Eugenia Casillas -quien en 1993 se insertó a la Pastoral Hospitalaria con los enfermos del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara, hoy llamado Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”- tuvo la feliz idea de integrar una comunidad que hiciera realidad la existencia de un mundo más fraterno y solidario: “Así nació Galilea 2000, A.C. Para ello, se dio a la tarea de buscar un lugar para brindar apoyo humanitario a todos estos hermanos, y de una forma casi milagrosa, Maru recibió ese hermoso recinto llamado ‘Las Cuadritas’, un lugar fundado por Fray Antonio Alcalde, y que era el último vestigio que quedaba de las casas originales financiadas por este benefactor Obispo”.

Actualmente, allí los enfermos pobres y sus familiares tienen un hogar temporal donde experimenten el amor, cuidados y la dignidad que les es propia.


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La aportación de Galilea 2000

Desde sus inicios en el año 2000, Galilea ha creado un impacto social en casi 45 mil personas. Ha logrado sinergias con otras Instituciones para diversos apoyos, en concreto para el Colectivo de afectados con cáncer, como: “Mi Gran Esperanza”, “Mano amiga”, “Mi último deseo”, “Cruz Rosa”, “Casa de la Amistad”, “Gimnasios Curves”, en su campaña contra el cáncer de mama, así como con particulares que han sido donadores generosos para la Causa.

Hoy en día, Galilea está iniciando el “Proyecto IMMI, Abrazando a los Enfermos con Cáncer”, impulsado por un grupo de mujeres voluntarias que han desarrollado un producto, un desodorante corporal elaborado con ingredientes naturales, el cual promueve la autoexploración y lleva el nombre de IMMI (“Mamita”, en arameo).

“Este grupo de mujeres voluntarias solicitó apoyo a diferentes empresas de Jalisco que generosamente han donado todo lo necesario para la elaboración y venta de este desodorante, cuya fórmula fue también dispensada por una marca local. Proyecto IMMI busca, con sus ganancias, abrazar a los enfermos con cáncer en sus necesidades físicas más apremiantes, como lo son los medicamentos, tratamientos, prótesis, pelucas, pomadas dermatológicas, apoyos para el transporte… pero también busca ir más allá, y se ha puesto como meta el animarlos y enseñarles mejores hábitos alimenticios y formas de vida más saludables”.

El Grupo desarrolla esta misión durante el tiempo que los enfermos y sus familias se hospedan en ‘Las Cuadritas’: “El tiempo que los beneficiados pasan en el Albergue es vital para poder ayudarlos mediante pláticas y talleres que les orienten a modificar esos hábitos de vida que les acarrean la falta de salud. Estadísticamente hablando, la población más elevada en Galilea es la de pacientes de cáncer. ‘Dar, recibir y devolver’ es un círculo que no debe romperse. A los beneficiarios de IMMI se les hace un encargo muy especial: la forma de agradecer el apoyo recibido es mediante la oración (el rezo del Rosario) por los Sacerdotes del mundo. Creemos que la oración del enfermo es muy poderosa, ya que ellos son los consentidos de Jesús de Galilea”.



El nombre de Galilea surge de la cita evangélica “Vayan a Galilea; allí me verán” (Mt. 28,10).

Galilea es el lugar de la acción de Jesús. En Galilea podemos encontrar al mismo Dios, representado en la persona de los enfermos más necesitados.



Galilea 2000


Los valores de Galilea son: La justicia, la misericordia, la generosidad y el cuidado del medio ambiente.

Las actividades que realiza para la obtención de recursos son muy variadas y siempre han encontrado una respuesta muy positiva de la comunidad tapatía en la organización de eventos benéficos, como:

“Canto de Amor por México” (Concierto en el Teatro Degollado).

“All in one” (Torneo de Golf).

Programa “de 10 en10” (solicitud de donativos económicos a empresas, escuelas, cotos y asociaciones de más de diez personas).

Donativos de particulares y de empresas con Tarjeta de Crédito y Débito, así como en especie.

Redondeos.

Proyecto de gestión de recursos universitarios.



Contacto:

Calle Liceo No. 573, Sector Hidalgo, Zona Centro (entre las Calles de Hospital y Guillermo Prieto).

Tel/Fax: 36 13 24 96 y 36 13 58 35.

Correo:

galilea2000ac@yahoo.com.mx y

galilea2000acjch@hotmail.com



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