El Arzobispo señaló emocionado “yo las he visto pasando casa por casa, negocio por negocio, empresa por empresa, persona por persona, golpeando las puertas, golpeando los corazones de manera incansable y por una causa noble, tal vez la causa más noble de todas, un profundo amor a Dios que las lleva a un profundo amor por el prójimo y especialmente al más necesitado y eso en pleno siglo XXI es un testimonio extraordinario”.
Agregó que “lo más probable es que más de alguno que pase por fuera de este edificio se pregunte, qué es lo que aquí se hace; y cuando se enteren que es para atender al más necesitado, al más pobre, uno tiene que reconocer que Dios sigue actuando en la historia”.
Luego, vino el momento de la bendición del Altar y del templo, momento en el cual se encendieron las luces que iluminaron por completo el lugar, que estuvo colmado de personas que acogieron la invitación de las Hermanas que quisieron compartir su alegría.
Durante la liturgia las religiosas agradecieron profundamente al Señor por todos los beneficios recibidos a través de amigos y bienhechores de esta gran obra que entrega dignidad y cariño a ancianos de escasos recursos.
Don Delfín Mendoza vivía en el Hogar que fue terremoteado, se fue a Osorno y ahora agradeció volver a su nueva casa, “estuvimos cuatro años en Osorno porque la casa se vino toda abajo, después cuando supe que nos íbamos a venir no hallaba la hora que llegara el día, porque quería llegar a nuestra casa, porque ésta es la casa nuestra”, dijo muy contento.
Actualmente viven 35 ancianos. El antiguo hogar era de adobe y hasta el 27 de febrero tenía 106 años, pero se cayó con el terremoto y los ancianos fueron derivados a Osorno, hasta ahora que volvieron en su mayoría a la casa de acogida.
8.600 metros cuadrados constituyen la nueva residencia para ancianos, la que cuenta con lavandería, peluquería, salas de estar, piezas individuales, servicio dental y kinesiología, además de box médicos.
La ceremonia de bendición concluyó con un ágape, ocasión en la que pudieron compartir todos los presentes a esta celebración que alegra tanto a la Iglesia de Concepción.
Fuente: Comunicaciones Concepción
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